Era cuestión de tiempo que el ‘caso Koldo’, ‘caso Ábalos’ y ahora ‘caso Cerdán’ tocara el plano legislativo. A tan solo 24 horas de votar la Ley de Movilidad Sostenible en la Comisión de Transportes del Congreso, el Gobierno decidió suspender la votación.
Desde el Grupo Socialista esgrimen que la desconvocatoria respondía a ganar más tiempo para cerrar nuevos acuerdos a un proyecto que ya acumula casi 140 modificaciones: 35 enmiendas en sus términos y 102 transaccionales.
Y, según informan otras fuentes de la Comisión, ya había registrada otra decena de enmiendas pactadas para la votación del jueves, además de las casi 400 enmiendas que siguen ‘vivas’.
Sin embargo, todos los portavoces consultados confirman que la razón de la desconvocatoria no es otra que la negativa de Podemos a respaldar el proyecto, tal y como adelantó Demócrata.
Podemos no quiere negociar
En los últimos días diferentes cargos de Podemos, con Ione Belarra a la cabeza, han subrayado no tener abierta ninguna negociación con el Gobierno de coalición. Y, aunque no lo hayan explicitado, no responde a que no les hayan podido buscar, sino porque no quieren mantener contactos con el Ejecutivo ante la cascada de informaciones que relacionan a ahora antiguos cargos socialistas con una presunta trama de corrupción.
En el caso de la Ley de Movilidad Sostenible, con el agravante de que el proyecto procede del Ministerio de Transportes, epicentro de los presuntos amaños de licitaciones de obra pública. La investigación de la Guardia Civil alcanza a contratos de la Dirección General de Carreteras y ADIF.
En la formación ‘morada’ trasladaron al Ejecutivo esta semana que no es momento de negociar el proyecto, y prefieren aplazar la negociación. Pero no unas semanas. “A partir de septiembre hablamos. Si hay septiembre, claro”, remarcan a Demócrata desde Podemos, poniendo en duda que la legislatura no acabe antes.
El PSOE quiere votar en julio
No son esos, sin embargo, los plazos que manejan en el PSOE. Según han confirmado varios portavoces de la Comisión, los planes del Grupo Socialista es volver a intentar en julio la aprobación de la norma.
Ello requiere la habilitación de sesiones extraordinarias por parte de la Mesa del Congreso, ya que julio no es hábil a efectos de actividad parlamentaria.
¿Es posible compatibilizar voluntades? ¿Aprobar la norma en julio y respetar la ‘tregua legislativa’ que pide Podemos? Técnicamente, sí.
Podemos no tiene representación en la Comisión de Transportes y Movilidad Sostenible, ya que la representación del Grupo Mixto recae en el BNG, y el Gobierno puede aprobar el proyecto en una sesión extraordinaria de la Comisión para la que, en principio, tiene los números.
Y, elevado el proyecto a Pleno, no examinarlo allí hasta empezar un nuevo período de sesiones en septiembre. Para ello, eso sí, deberá tener cerrado el aval de Podemos. Si vota en contra, tendría en su mano bloquearlo. La suma de sus cuatro representantes, más PP, Vox y UPN, alcanzan 175. Suficientes para impedir la aprobación de la norma.