La Asociación Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM), entidad proisraelí, tiene previsto presentar una denuncia penal contra la regidora de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Palma, Lucía Muñoz, a la que atribuye posibles delitos de incitación al odio y a la violencia por haber expresado su deseo de que "desaparezca el Estado de Israel".
Según ACOM, la denuncia se basa en unas manifestaciones realizadas por Muñoz, también coordinadora de Podemos en Baleares, en un vídeo del programa 'Invierno Rojo', emitido en el canal de televisión Canal Red, donde enumeraba sus deseos para 2026. Entre ellos mencionaba, además, que hubiera una "Palestina libre del río al mar", "la expropiación de las viviendas de los fondos buitre" y "la bajada de los alquileres por ley".
En un comunicado difundido en su perfil de la red social X, la organización sostiene que estas palabras "aluden explícitamente a la desaparición de un Estado soberano", al entender que implican una referencia directa a la "eliminación de la entidad política e institucional de un pueblo o nación determinada".
ACOM argumenta que "esta formulación trasciende la crítica política y entra en el terreno de la incitación a la violencia y al odio, lo que vulnera preceptos esenciales del ordenamiento jurídico español". A su juicio, estas manifestaciones podrían encajar en el artículo 510 del Código Penal, con un posible agravante de discriminación, y se verían reforzadas por la "reiteración de expresiones similares en redes sociales y la difusión pública de las mismas potencian la gravedad de los hechos y su idoneidad para generar un clima de hostilidad o violencia".
Para la entidad, todos estos elementos, conforme a la doctrina de los tribunales, "excluyen la cobertura de la libertad de expresión cuando degeneran en fomento del odio o la violencia". En la misma línea, remarcan que la libertad de expresión, aunque es un derecho fundamental protegido por la Constitución, "no es absoluto" y, por tanto, no cobija mensajes que puedan suponer incitación a la violencia, al odio o a la discriminación, en especial cuando se dirigen contra un colectivo definido por su nacionalidad o identidad común.
La denuncia que ACOM tiene intención de registrar incorporará copias de las publicaciones difundidas, referencias al carácter público y masivo de su difusión, así como las disposiciones penales que consideran aplicables, con el fin de que se valore su posible consideración como delito de odio y/o incitación a la violencia.
Finalmente, la organización concluye que "ACOM reitera su compromiso con la defensa de la convivencia democrática y contra el antisemitismo, al apelar al cumplimiento estricto de las normas penales que protegen contra el discurso que pueda alimentar el odio o la violencia".