El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, ha mantenido un encuentro por videollamada este martes con el comisario europeo de Transportes, Apostolos Tzitzikostas, en el que ha mostrado su preocupación por la presión que está llevando a cabo Ryanair en el seno de la CE para que las autoridades comunitarias interfieran en las reclamaciones judiciales que se han presentado contra las sanciones impuestas desde su Ministerio contra la aerolínea de Michael O’Leary y otras compañías de vuelos low cost.
El ministro se ha mostrado sorprendido con ciertas similitudes entre los argumentos del Comisario y la línea general de las intervenciones de Ryanair y confía en que esto no signifique que desoiga su obligación de defender los derechos de los pasajeros y de las pasajeras de la UE, según ha podido saber Demócrata de la Representación Permanente de España ante la Unión Europea (REPER).
Bustinduy ha podido transmitir a Tzitzikostas, además, que, de acuerdo la legislación española y al Tribunal de Justicia Europeo (TJUE), Ryanair y las otras aerolíneas sancionadas cometieron prácticas ilegales y abusivas para las personas consumidoras, tales como cobrar un extra a los pasajeros por llevar su equipaje de mano a bordo de la cabina o cobrar un extra por la selección de asiento para acompañar a niños/as o personas dependientes.
El ministro también ha subrayado ante el Comisario que estas sanciones se llevaron a cabo con todas las garantías procesales y preservando la seguridad jurídica para las compañías afectadas. Así mismo, ha recordado que en la última Comisión del Parlamento Europeo sobre Transportes, 38 eurodiputados, de un total de 42, votaron en contra de legalizar el cobro del equipaje de mano.
Por último, Pablo Bustinduy ha reclamado al Comisario que reciba a representantes del BEUC (Organización Europea de Consumo) y a las asociaciones de consumidores de 13 países miembros de la UE, entre ellos España, que se han unido para denunciar las prácticas abusivas de las aerolíneas low cost.