Castilla y León exige a Sánchez un debate en el Senado y critica su «cobardía» por atacar sin derecho a réplica

Carlos Fernández Carriedo acusa a Pedro Sánchez de "cobardía" y propone un debate en el Senado con los líderes autonómicos.

Carlos Fernández Carriedo, consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta de Castilla y León, ha lanzado una crítica este jueves hacia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tildándolo de actuar con “cierta cobardía” al criticar a los gobiernos autonómicos desde el Congreso de los Diputados, un lugar donde ellos no tienen la posibilidad de intervenir ni responder. Fernández Carriedo ha propuesto que se realice un debate en el Senado que incluya a todos los presidentes autonómicos.

En su intervención tras el Consejo de Gobierno, el consejero lamentó que Sánchez usara su tiempo en el Congreso para abordar temas específicos de Castilla y León, como los incendios forestales o la gestión de la sanidad, sin presencia ni posibilidad de réplica de los gobernantes regionales. Según Fernández Carriedo, esto muestra un intento de Sánchez de iniciar un debate sobre el estado de las comunidades autónomas en lugar de sobre la nación, lo que revela “cierto nerviosismo” frente al contexto electoral próximo.

El portavoz de la Junta subrayó que el Senado, siendo la cámara de representación territorial, sería el “foro más adecuado” para este tipo de debates, y mencionó que el presidente de la Junta estaría dispuesto a participar si Sánchez lo considera pertinente.

Adicionalmente, Fernández Carriedo respondió a las críticas de Sánchez sobre la sanidad en Castilla y León, mencionando que, aunque el presidente del Gobierno señaló que un 3,5 por ciento del gasto sanitario regional se destina a servicios no públicos, los datos del Ministerio de Sanidad muestran que la región es una de las tres con mayor inversión en sanidad pública, alcanzando el 96,5 por ciento del presupuesto sanitario. También recriminó a Sánchez por no mencionar los datos de otras comunidades con mayor gasto en sanidad privada, incluidas algunas gobernadas por el PSOE, y defendió la solidez del sistema sanitario de Castilla y León, desmintiendo las alegaciones del presidente del Gobierno.

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