Alíca Romero, consellera de Economía de la Generalitat de Cataluña, ha expresado su conformidad con la promesa hecha este lunes por la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, de introducir un renovado modelo de financiación autonómica en un plazo de dos meses. Romero ha destacado que este compromiso resulta alentador para el Gobierno de Salvador Illa, ya que considera que asegura la singularidad de Cataluña.
Tras participar en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) en el Ministerio de Hacienda, Romero ha manifestado su precaución respecto a los recursos asignados a este nuevo modelo. Montero ha defendido principios como la suficiencia financiera, la responsabilidad fiscal, la solidaridad y la eliminación de las entregas a cuenta.
La consellera ha elogiado también la posibilidad de que la Agencia Tributaria adopte un enfoque más federal y mejore la eficacia en la lucha contra el fraude fiscal, área que podría experimentar un incremento. Además, ha sugerido la posibilidad de aumentar la cesión de tributos y la inclusión de nuevos impuestos, lo que considera crucial para pasar de un modelo de gasto a uno de ingreso.
CATALUÑA NECESITABA LA BILATERALIDAD
En este contexto, Romero ha aplaudido que Montero haya propuesto combinar la multilateralidad con la bilateralidad, reflejando la firme voluntad de autogobierno de Cataluña. La consellera ha enfatizado la importancia de la bilateralidad para Cataluña, aunque ha reconocido que existen otras regiones con particularidades fiscales, como Canarias.
LA SINGULARIDAD DE CATALUÑA DENTRO DEL MODELO
Al ser consultada sobre la prioridad entre la financiación singular de Cataluña y el nuevo modelo general, Romero ha asegurado que el sistema garantizará la singularidad catalana y que las negociaciones se llevarán a cabo de manera bilateral. Ha negado cualquier favoritismo hacia Cataluña, subrayando el principio de solidaridad y la necesidad de corregir ciertas desigualdades.