El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, expresó este martes que le “preocupa mucho” las “nuevas tendencias” que están tomando fuerza en la UE tras la aprobación del modelo italiano que plantea la creación de centros de retención de migrantes en países terceros.
Durante la sesión de control del Pleno del Parlamento, y en contestación a una pregunta del PP, advirtió de que teme que los territorios situados en la frontera exterior de la Unión terminen convirtiéndose “de hecho” en centros de reclusión para menores y migrantes extranjeros.
“Eso sí puede ser un gran problema para Canarias, y frente a eso espero que al menos la unidad que hemos mantenido hasta ahora la sigamos manteniendo”, subrayó el jefe del Ejecutivo regional, reclamando mantener el consenso político en este asunto.
En relación con la actuación del Gobierno central y el reparto de menores migrantes, reconoció que en Canarias no están “satisfechos”, ya que tras la aprobación de la reforma de la ley de extranjería y los autos del Supremo esperaban “una reacción más eficiente y diligente”.
No obstante, remarcó que “hay que ser honestos” y admitir que se han producido avances, aunque precisó que el traslado de menores solicitantes de asilo suma por ahora 550, a los que se añaden otros 300 “retenidos” en el centro “Canarias 50”, mientras que el mecanismo de derivación en 15 días previsto en la contingencia migratoria “no está funcionando”.
Clavijo detalló que antes de que finalice el mes de marzo “tienen que salir más de 2.000” menores para que en las islas permanezcan unos 2.200, cifra que coincide con el límite fijado por el triple de la capacidad ordinaria de acogida.
En este contexto, indicó que en las últimas semanas han llegado alrededor de 200 menores al archipiélago “y no salen con agilidad”, lo que, a su juicio, implica que “la presión y la inadecuada asistencia va a perdurar en el tiempo”.
Por su parte, Juan Manuel García Casañas, presidente del Grupo Popular, censuró que Canarias continúe soportando la atención a los migrantes ante la “pasividad del” Gobierno central, con algo más de 9.000 personas solo en la isla de El Hierro.
Reprochó al presidente Pedro Sánchez que cierre acuerdos con rapidez con Junts mientras que a Canarias únicamente se le ofrece “más deuda”, el incumplimiento de compromisos o quedar fuera de la reunión de alto nivel entre España y Marruecos.
Acusó además al Ejecutivo central de “ralentizar” el traslado de menores, incluidos los que no son solicitantes de asilo, algo que calificó de “tomadura de pelo”, y ironizó con que “sí se ha dado prisa” para “omitir las denuncias y mandar callar a las mujeres” que denunciaron acoso sexual y laboral por parte de un asesor de La Moncloa.
García Casañas sostuvo que el Gobierno “no tiene futuro” y recordó que, desde que se activó la contingencia migratoria, las derivaciones deben realizarse en 15 días, pero de los más de 250 menores llegados en las últimas semanas “solo han aceptado un medio centenar”.










