El Consistorio de Úbeda en Jaén se encuentra en plenas labores para “salvar el emblemático laurel” que se ubica en la lonja del Hospital de Santiago, considerado parte integral del “patrimonio natural y sentimental” de la localidad.
Desde el área de Parques y Jardines, se han implementado desde hace tiempo “distintas actuaciones para preservar y cuidar este “majestuoso ejemplar”, tal como informó el Ayuntamiento el miércoles pasado.
“Durante este tiempo, se han aplicado diversos tratamientos nutricionales y fitosanitarios con el fin de mantener su salud y vigor. Sin embargo, en las últimas semanas se ha detectado la presencia de un hongo del género Ganoderma sp. que afecta a la madera de árboles de avanzada edad”, señalaron desde el Consistorio.
Como precaución y para asegurar la seguridad de las personas, se ha acordonado el área circundante al árbol mientras se realizan estudios más exhaustivos y se aplican tratamientos adicionales. Estos trabajos se están desarrollando bajo la supervisión de los técnicos municipales en colaboración con especialistas de la Universidad de Jaén y del Jardín Botánico de Córdoba.
“Nuestro principal objetivo es salvar este emblemático laurel y el Ayuntamiento agotará todos los recursos posibles para lograrlo”, afirmaron. Las medidas actuales incluyen la eliminación del hongo visible, desinfección del suelo, sustitución del sustrato afectado y reducción del riego para prevenir el exceso de humedad que podría favorecer el crecimiento de hongos.
El Ayuntamiento ha declarado que “se están adoptando todas las medidas necesarias, con la máxima profesionalidad y sensibilidad, para preservar este ejemplar histórico que forma parte del patrimonio natural y sentimental de Úbeda”.
“El majestuoso laurel que da sombra y vida a la lonja del Hospital de Santiago no es solo un árbol. Es historia viva de Úbeda. Ha visto pasar generaciones, ha acompañado momentos y ha formado parte del paisaje emocional de nuestra ciudad, por esta razón trabajamos con dedicación y esperanza para protegerlo, porque cuidar de él es cuidar también de nuestra memoria y de nuestro paisaje”, concluyeron.