Nuevo modelo de control para mayores de 65
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha un nuevo sistema de control destinado a los conductores mayores de 65 años, que reemplaza la retirada automática del permiso por restricciones individualizadas.
El objetivo es equilibrar la seguridad vial con el derecho a la movilidad, adaptando las condiciones de conducción al estado físico y cognitivo de cada persona.
Según datos del organismo, la medida ya afecta a unos 250.000 conductores, en un país donde más de cuatro millones de personas superan esa edad y continúan al volante.
Evaluación médica personalizada
El nuevo sistema introduce evaluaciones individualizadas realizadas en los centros de reconocimiento de conductores.
En lugar de una decisión única de renovación o retirada del carnet, se valoran factores médicos, sensoriales y psicológicos que pueden limitar el tipo de conducción que cada persona puede realizar.
Estas restricciones quedan reflejadas en el permiso mediante códigos numéricos, visibles en el reverso del documento, que permiten identificar qué condiciones específicas debe cumplir el conductor.
Tipos de restricciones aplicadas
Entre las medidas más comunes figuran:
- Prohibición de circular de noche o en condiciones de baja visibilidad.
- Límites geográficos de desplazamiento, restringiendo la conducción a zonas concretas.
- Obligación de conducir acompañado en trayectos largos.
- Uso obligatorio de gafas o audífonos, según el informe médico.
La DGT explica que el propósito no es sancionar, sino mantener la autonomía de las personas mayores, garantizando al mismo tiempo la seguridad vial.
Seguridad y envejecimiento al volante
Los informes de la DGT concluyen que los conductores mayores no provocan más accidentes que los grupos jóvenes, ya que compensan la pérdida de reflejos con más prudencia y experiencia.
Aun así, el organismo considera necesario adaptar las normas al envejecimiento de la población y mejorar la vigilancia médica periódica.
La DGT insiste en que este modelo es “más humano y justo”, al sustituir decisiones automáticas por una evaluación caso por caso, que tenga en cuenta la evolución de cada conductor.
¿Cuándo se aplicará?
La nueva política de la DGT se aplicará de forma progresiva a medida que los permisos de conducción se renueven.
Además, la institución trabaja con el Ministerio de Sanidad para unificar criterios médicos y reforzar los reconocimientos en los centros autorizados.














