A mediodía la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha entrado en la sede del Partido Socialista, en la madrileña calle de Ferraz, en busca del clonado del correo electrónico personal del ex número tres del partido, Santos Cerdán. El juez que instruye el conocido como «caso Koldo» ha decidido imputar a Cerdán y a requerido a la Guardia Civil entrar también en la sede del Ministerio de Transportes y Adif en busca de mensajes relacionados con la supuesta trama de corrupción.
Tras su imputación, Cerdán está llamado a declarar como investigado el próximo día 30 de junio. Su nueva condición procesal le permite acogerse a su derecho de no declarar. La semana judicial arrancará el lunes con las declaraciones del que fuera ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y su ex asesor, Koldo García.
El alto tribunal ha decidido mantener la competencia para investigar a Cerdán pese a la pérdida de su aforamiento, al considerar que los hechos que se le atribuyen están estrechamente vinculados con los que involucran al exministro de Transportes, José Luis Ábalos, quien aún conserva su condición de diputado.
En paralelo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mantenido un encuentro «no oficial» con el president de la Generalitat, el socialista Salvador Illa. La reunión no aparecía en ninguna de las agendas de los dos líderes. Desde que se le viera en la sesión de control del miércoles, Sánchez no ha vuelto a aparecer en público y mantiene vacía su agenda.
El informe de la UCO que apunta al ex secretario de Organización del PSOE como epicentro de una trama que se cobraba mordidas a cambio de adjudicaciones públicas y colocaba a cercanos en empresas dependientes del Gobierno, ha sacudido la agenda política en las dos últimas semanas a la espera de las medidas prometidas por el presidente y las reacciones de sus socios.
