Los cuatro partidos que sostienen al Gobierno de Canarias (CC, PP, ASG y AHI) han aprobado este martes las terceras cuentas autonómicas de la legislatura, que ascienden a 12.491,4 millones, un 7% más que las de este ejercicio, es decir, 813,2 millones adicionales.
El presupuesto de 2026 ha incorporado algo más de 200 enmiendas del propio cuatripartito, que redistribuyen en torno a 95 millones de euros, siete propuestas de la diputada no adscrita, Marta Gómez, y menos de una decena de la oposición, ninguna de Vox, algunas de ellas aprobadas mediante transacción.
También se ha tumbado un voto particular de NC-bc --con el rechazo de CC, ASG, PP, AHI y Vox y la abstención del PSOE-- que cuestionaba una disposición adicional destinada a emplear fondos europeos en el abono de ayudas a los plataneros de La Palma afectados por la erupción volcánica.
La consejera de Hacienda, Matilde Asián (PP), ha puesto en valor el trabajo de su departamento en un contexto "muy complejo" y con escasez de datos, subrayando que se ha logrado aportar "estabilidad" a la ciudadanía canaria. Ha advertido de que 2026 será un ejercicio "muy importante" si finalmente se aborda la reforma del sistema de financiación autonómica, dado que supone "más del 70%" de los ingresos del archipiélago.
La diputada no adscrita, Marta Gómez, ha elogiado al Ejecutivo regional por "poner el foco en las personas" y ha defendido que sus enmiendas, elaboradas junto a ciudadanos y colectivos sociales, se han orientado a "construir" frente a la actitud destructiva que, a su juicio, mantiene la oposición.
El portavoz del Grupo Mixto, Raúl Acosta, de la Agrupación Herreña Independiente (AHI), ha resaltado la aprobación de las cuentas en un escenario de "incertidumbre" por la falta de Presupuestos Generales del Estado y de información suficiente. Ha reivindicado la "lealtad" y "exigencia" de su formación con el desarrollo de las llamadas 'islas verdes' y ha reclamado revisar la relación con el Estado para asegurar el cumplimiento del REF.
Para Acosta, las cuentas públicas son "necesarias" para que Canarias continúe avanzando y no constituyen un "cheque en blanco" de su partido, ya que, ha dicho, es preciso seguir "profundizando" en las medidas fiscales, como la bonificación a los carburantes, con el fin de impulsar el progreso económico y social de las 'islas verdes'.
ASG defiende previsibilidad y estabilidad
Casimiro Curbelo, portavoz de ASG (Agrupación Socialista Gomera), ha puesto en relieve la "coherencia y responsabilidad" de un presupuesto que destina el 80% de sus recursos al gasto social y aporta "previsibilidad y estabilidad" para sostener los servicios públicos, mejorar las infraestructuras y sin recurrir a subidas de impuestos.
Ha reconocido que "no es fácil" reducir el IGIC porque su recaudación repercute en la financiación de cabildos y ayuntamientos y ha indicado que el margen del presupuesto "no da para más" y responde a una "estrategia coherente" que combina "crecimiento y justicia social".
El portavoz de Vox, Nicasio Galván, ha criticado que las cuentas "no enfrentan" los principales problemas de las islas, como el aumento de la criminalidad, la baja natalidad --"pasa de largo"-- o la inmigración, a la que, en su opinión, se le da "una patada a seguir".
Ha reprochado al Gobierno que incumpla su promesa electoral de rebajar el IGIC y ha exigido una reducción "brutal" del gasto en la estructura administrativa, citando el Instituto de Igualdad, la Consejería de Transición Ecológica o los "chiringuitos y cargos de confianza".
Esther González (NC-bc) ha acusado al Ejecutivo de que "vive en una dimensión paralela" porque, según ha dicho, desatiende los problemas reales del archipiélago, mientras que su compañera, Carmen Hernández, ha calificado las cuentas de "injustos, antisociales y tramposos", al considerar que están "inflados" con fondos europeos.
Ha señalado que el presupuesto consolida el "modelo neoliberal" de CC y PP de "desmantelar lentamente" los servicios públicos para beneficiar a la sanidad y la educación privadas, y ha añadido el "control" de RTVC para "manipular a la población".
Asimismo, ha cuestionado que la acción del Gobierno sea "errática" porque "no apuesta" por la innovación ni afronta con decisión la lucha contra la pobreza.
Fernando Enseñat (PP) ha subrayado que las cuentas disponen de "más recursos que nunca", con un 80% destinado a políticas sociales y un plan de alivio fiscal cifrado en 44 millones.
Ha defendido que "Canarias sigue progresando" gracias a este presupuesto, ha justificado que el IGIC no se reduzca por las restricciones de las reglas fiscales y ha afeado a la oposición que presente enmiendas "decepcionantes e inviables".
CC reivindica "un Gobierno que cumple"
Socorro Beato (CC) ha asegurado que las cuentas reflejan a un "Gobierno que cumple" y a una mayoría parlamentaria "sólida, cohesionada y leal".
Ha remarcado que el Ejecutivo mantiene un "rumbo firme" y sitúa a las personas "en el centro" de su acción política, y ha destacado la enmienda del cuatripartito para garantizar las ayudas a los plataneros de La Palma como ejemplo de "política útil".
Además, ha instado al PSOE a que "deje trabajar" al Gobierno canario y "no torpedee desde Madrid". "Tenemos un ministro canario que está en contra de Canarias", ha añadido.
El portavoz del Grupo Nacionalista, José Miguel Barragán, ha censurado a la oposición por el "no a todo y el cuanto peor mejor" pero considera que el presupuesto "pisan tierra y miran a la gente".
Ha admitido que el texto "no es perfecto" porque debe lidiar con las limitaciones de la regla de gasto y la ausencia de PGE, y ha pedido a la oposición que opte entre "la protesta fácil" o "decidir y priorizar".
Sebastián Franquis, portavoz del Grupo Socialista, ha lamentado que "la mano tendida y el diálogo" del Gobierno y los grupos que lo apoyan se traduzca en aceptar solo tres enmiendas de 544 y ha cuestionado que no se rebaje el IGIC por la regla de gasto mientras sí se bonifica el impuesto de sucesiones y donaciones. "Para los ricos no había problema", ha señalado.
Su compañero Manuel Hernández ha afirmado que el presupuesto ha quedado aún más "desfigurado" tras la incorporación de las enmiendas parciales --"un Frankenstein presupuestario"--, al considerar que carece de "sensibilidad y empatía" con las dificultades de la ciudadanía, y ha calificado de "nefasta" la gestión de los fondos europeos.