Óscar Puente, ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, comunicó el miércoles que el análisis preliminar del estudio para implementar el servicio de Cercanías en Galicia incluye establecer centros neurálgicos en Coruña y Vigo, que serán parte de las cuatro «zonas principales» y una área complementaria, con el objetivo de configurar la movilidad «cotidiana» en la región.
Durante su participación en el Congreso, en respuesta a una interpelación del diputado del Bloque Nacionalista Galego (BNG) Néstor Rego acerca de la situación ferroviaria en Galicia, Puente enfatizó que los detalles del estudio deben tomarse con «cautela» ya que aún está en desarrollo.
«Sin entrar en profundidad, sí que le diré que se están estudiando cuatro zonas principales, y tómenlo, por favor, con cautela hasta que no esté el estudio aprobado de manera definitiva. Son cuatro zonas principales y una zona complementaria. Un área de Cercanías de A Coruña, un área de Cercanías de Vigo, la línea atlántica global, la línea de interior y el complemento de ancho métrico», explicó el ministro.
Además, Puente indicó que el documento continúa analizando «todos los tráficos posibles» en Galicia, no solo los de Cercanías, sino también los regionales que articulan la comunicación ferroviaria de la región. Reveló que la intención del Ministerio es completar el estudio antes de finales de 2025 y presentarlo antes de 2026.
COMPROMISO PESE A LA DIFICULTAD
Puente resaltó el «firme compromiso» del Gobierno con la mejora de las comunicaciones ferroviarias en Galicia, una región donde la compleja orografía implica que los avances sean «más lentos» de lo deseado.
«Se avanza. En materia de infraestructuras ferroviarias, los avances son más lentos de lo que nos gustaría, pero en perspectiva son avances importantes y van a buena velocidad. Galicia tiene una orografía muy compleja y cualquier avance requiere un mayor esfuerzo presupuestario y de complejidad e ingeniería que en otros territorios», admitió.
El ministro listó algunas actuaciones del Gobierno de Pedro Sánchez, muchas relacionadas con el acuerdo de investidura entre el PSOE y el BNG, como la finalización del último tramo de la línea de AVE, la implantación de los sistemas RTMS del eje Atlántico, la conexión del tramo Ourense-Santiago o las «mejoras» en la oferta y entrada de los servicios ferroviarios.
Puente también destacó que el número de circulaciones diarias entre Madrid y Galicia es de 22 en días laborables, 14 los sábados y 16 los domingos, lo que ha elevado la oferta de plazas a 68.500 semanales, «un 109,3% más que antes de la puesta en marcha». Enfatizó la puntualidad media en el corredor de Galicia, donde alcanza el 91% en el servicio de media distancia y del 87 % en los servicios Avant, «ambas superiores a la media en el conjunto del territorio español».
BNG RECLAMA MÁS FRECUENCIAS, PUNTUALIDAD Y HORARIOS ADAPTADOS
Por su parte, Néstor Rego (BNG) criticó las «décadas de abandono» del transporte de trenes por parte de los gobiernos del PP y PSOE, aunque reconoció mejoras con el actual Ejecutivo, destacando los «atrasos importantes» en la región.
«Precisamos infraestructuras de servicios adecuadas. No despreciamos la conexión de alta velocidad con Madrid, pero reiteramos, porque es verdad y constatado, que la principal preocupación es resolver la movilidad por razón laboral», afirmó, insistiendo en la importancia de acelerar la llegada del «tren de proximidades» y de modernizar la red ferroviaria interna.
Además, mencionó que Ferrol es «la ciudad de Galicia peor comunicada por ferrocarril», con un tiempo estimado de 1 hora 20 minutos para recorrer los 68 kilómetros que la separan de A Coruña.
Rego demandó «más frecuencias, horarios adaptados, precios más bajos» y «un plan para acabar con las demoras», así como la recuperación de algunos servicios suspendidos durante la pandemia, como el trayecto nocturno Monforte-Barcelona.