El renombrado físico Rainer Weiss, de origen alemán y con nacionalidad estadounidense, quien fue laureado con el Premio Nobel de Física en 2017 y nombrado doctor honoris causa por la Universidad de Almería en 2018, ha muerto el pasado 25 de agosto en Cambridge, Massachusetts, a pocos días de celebrar su cumpleaños número 93.
Reconocido como un pilar de la física moderna, Weiss deja un legado de contribuciones significativas y visión innovadora. Fue premiado con el Nobel por su crucial contribución en la detección de ondas gravitacionales, un avance destacado en la ciencia, han destacado fuentes de la Universidad en una nota de prensa.
Su carrera estuvo dedicada al estudio del universo, motivando a futuras generaciones de científicos y estableciendo nuevos métodos para explorar el cosmos. El mismo año de su reconocimiento con el Nobel, también recibió el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica.
Weiss fue un pionero en la aplicación de la interferometría láser en el proyecto LIGO, lo cual fue fundamental para validar una predicción clave de la Teoría de la Relatividad General de Einstein. También, tuvo un papel importante en el experimento COBE, que se centró en la medición del fondo cósmico de microondas, esencial para comprender el origen y evolución del universo.
Estos hallazgos expandieron la capacidad de observación del espacio, consolidando a Weiss como un emblema de la excelencia científica. Su legado sigue presente, y fue honrado por la Universidad de Almería con el doctorado honoris causa en 2018, durante una ceremonia en el campus de la UAL el 4 de junio de 2018, con Antonio Fernández Barbero como padrino.
En esa ocasión, Weiss alabó a la universidad almeriense y exhortó a las nuevas generaciones a comprometerse con el estudio y la investigación: «Os animo a seguir adelante… y animo sobre todo a los jóvenes a que se dejen atraer por la fascinación de los estudios y de la investigación».
Carmelo Rodríguez Torreblanca, rector en aquel entonces, señaló que Weiss representaba la misión de la UAL de fomentar y compartir el conocimiento, refiriéndose a él como «embajador de los objetivos y valores que promueve la Universidad de Almería».
La Universidad ha expresado que «guarda con emoción el recuerdo de aquel momento y el testimonio vivo que dejó Weiss»: «Su huida del nazismo, su pasión por comprender el cosmos, y su capacidad de superar adversidades. Para la comunidad universitaria, sin duda, su ejemplo simboliza el compromiso con la ciencia, el coraje frente a la adversidad y la inspiración para el futuro».
Por ello, la UAL ha extendido sus «más sinceras condolencias a familiares, colegas, amigos y a toda la comunidad científica internacional». «Su figura permanecerá viva en nuestra memoria y unida al espíritu de la Universidad de Almería», concluyeron.
