El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha instado a Hamás a «deponer las armas y a liberar a los rehenes ahora». «Si lo hacéis, viviréis; si no, Israel os encontrará», ha añadido en el marco de su intervención este viernes en la Asamblea General de la ONU. Una intervención ante un plenario casi vacío después de que muchas delegaciones, entre ellas la española, se hayan retirado como símbolo de protesta.
En su discurso, Netanyahu ha negado el genocidio en Gaza: «Es lo contrario. Adoptamos medidas para minimizar las bajas de civiles» y ha afirmado que «Israel debe acabar el trabajo en Gaza tan pronto como sea posible». Además, ha asegurado que si los gazatíes pasan hambre es porque Hamás se queda con la comida.
Recuerdo a los rehenes
Uno de los principales ejes de su intervención ha sido el recuerdo y la defensa de los rehenes que permanecen secuestrados por Hamás para los que exige la inmediata liberación. En este sentido, ha leído sus nombres desde la tribuna.
«Estos monstruos se llevaron a más de 20 personas, muchos sobrevivientes del Holocausto. ¿Quién se lleva a abuelas y niños de rehenes?», ha sentenciado, a la par que ha prometido que los traerían «de vuelta a casa».
Dos estados
«Los palestinos no creen en la solución de los estados. Ellos no quieren un Estado Palestino, pero no quieren estar al lado de Israel. Cada vez que se les da un territorio lo utilizan para atacarnos. Ellos tenían un territorio en Gaza y nos atacaron una y otra vez. Esta es la verdad que incomoda», ha apuntado el primer ministro israelí. Sobre la decisión de cada vez más países de reconocer el Estado palestino ha asegurado que «alentará el terrorismo contra los judíos»
Autoridad Palestina
Por su parte, el presidente de la Autoridad Palestina (AP), Mahmud Abbas, ha denunciado el «genocidio» que desde hace tres años Israel viene ejecutando sobre la Franja de Gaza, así como los asentamientos en Cisjordania, y ha reivindicado ante la Asamblea General de Naciones Unidas el control del enclave sin la participación de Hamás, en un discurso grabado tras negarle Estados Unidos el visado de entrada al país.