Una oferta hostil para bloquear el pacto con Netflix
Paramount Skydance ha decidido ir directamente a los accionistas de Warner Bros. Discovery (WBD) con una oferta hostil de 30 dólares por acción, presentada después de que su propuesta inicial no recibiera respuesta del consejo de la compañía.
La cifra eleva el valor total de la operación a 108.400 millones de dólares, según la cifra avanzada por medios financieros estadounidenses.
La ofensiva llega apenas dos días después de que Netflix anunciara un acuerdo de 72.000 millones para quedarse con los estudios de cine y televisión de Warner y con su plataforma HBO Max, excluyendo las redes lineales.
Paramount denuncia que la operación con Netflix plantea interrogantes regulatorios en materia de competencia y sostiene que su propuesta es un “mejor acuerdo”, más competitivo y favorable para accionistas y consumidores.
Aval financiero y respaldo bancario sin precedentes
La oferta de Paramount está totalmente respaldada en efectivo, según CNBC, y cuenta con financiación de capital aportada por la familia Ellison y RedBird Capital y 54.000 millones de dólares en compromisos de deuda asegurados por Bank of America, Citi y Apollo Global Management.
Con estos recursos, Paramount insiste en que ofrece a los accionistas de WBD “certeza y liquidez inmediata”, en contraste con la estructura mixta en acciones y efectivo del acuerdo con Netflix, que además requerirá un análisis regulatorio prolongado.
Qué pretende Paramount con la adquisición
Si la OPA prospera, Paramount Skydance -propietaria de CBS, MTV, Nickelodeon y un amplio catálogo cinematográfico- absorbería por completo el negocio televisivo y cinematográfico de Warner Bros. Discovery, incluida:
- • Warner Bros. Studios,
- • HBO y Max,
- • CNN,
- • TNT,
- • así como la red de canales y activos de distribución global del conglomerado.
Fuentes citadas por Reuters y The Verge subrayan que Paramount quiere quedarse con la estructura completa de WBD, a diferencia de Netflix, que apuesta solo por una parte del grupo.
Este enfoque permitiría una integración corporativa total y daría lugar a uno de los mayores conglomerados audiovisuales del mundo.
Una guerra corporativa que puede remodelar Hollywood
La batalla por Warner se ha convertido en un punto de inflexión para la industria. La consolidación del sector del streaming, presionado por costes crecientes y una competición feroz por los contenidos, ha empujado a los grandes estudios a operaciones cada vez más ambiciosas.
Analistas citados por Financial Times advierten de que la operación podría reconfigurar el equilibrio de poder en Hollywood, afectando también a la disponibilidad de contenidos, acuerdos de exhibición y mercados internacionales.










