El secretario de Organización y coportavoz de Podemos, Pablo Fernández, ha afirmado que Junts«en ningún caso va a tumbar» al actual Gobierno y ha añadido que las advertencias de ruptura de la formación de Carles Puigdemont son «mucho ruido y pocas nueces».
Así lo ha señalado este lunes durante una rueda de prensa en la sede de Podemos, al referirse a la reunión que la dirección de Junts celebra en Perpiñán (Francia) para decidir si retira su apoyo al PSOE en lo que queda de legislatura, una decisión que probablemente se someterá a votación de la militancia.
«Nosotros creemos que Junts en ningún caso va a tumbar a este Gobierno; lo que puede tumbar al Gobierno es sin duda la vivienda y la inacción ante la especulación y ante el incremento del precio de la vivienda (…) Así que mucho ruido y pocas nueces», ha manifestado Fernández.
El dirigente del partido ‘morado’ ha reiterado que la legislatura no depende ni de los postconvergentes ni de Podemos, sino de la «voluntad» del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Asimismo, ha subrayado que su formación ha mantenido la misma postura durante todo el mandato y ha exigido al Ejecutivo que impulse de una vez «medidas de izquierda» y frene la «especulación salvaje» que domina el mercado inmobiliario.
También ha reclamado que se deje de destinar cantidades «ingentes» al gasto militar y se redirijan esos fondos a reforzar la vivienda social, aumentar las becas educativas y mejorar los servicios públicos. «Queremos que el Gobierno nos haga caso», ha concluido.
Sobre los Presupuestos 2026
Por otro lado, Fernández ha señalado que el PSOE todavía no ha contactado con Podemos para tratar los futuros Presupuestos Generales del Estado (PGE), si finalmente se presentan, y ha apuntado que siguen esperando «si tienen a bien» llamarles. Ha precisado además que, durante esta legislatura, los socialistas suelen convocarles «en el último momento» dentro de las rondas de contactos con los grupos parlamentarios.
El dirigente de Podemos ha recalcado que el Ejecutivo conoce perfectamente las condiciones de su formación para respaldar unas futuras cuentas públicas: intervenir el mercado de la vivienda para reducir los alquileres un 40% por ley, prohibir la compraventa de viviendas con carácter especulativo y romper toda relación con Israel.