Samuel Vázquez, vocero nacional de Vox en temas de Inmigración, Interior y Seguridad, ha señalado un aumento ‘escandaloso’ de un 460% en las agresiones sexuales a mujeres en Extremadura desde 2017, atribuyéndolo a las políticas socialistas que ha seguido María Guardiola durante su liderazgo en la Junta.
Guardiola es descrita por Vázquez como ‘una socialista con contrato temporal en el Partido Popular, pero socialista al fin y al cabo, que es famosa por sus líneas rojas, que son las tres que llevaron a Pedro Sánchez al poder’, y que son ‘fanatismo climático, ideología de género e invasión migratoria’.
‘Puro PSOE’, declaró Vázquez durante una rueda de prensa en Mérida, donde apoyó a Óscar Fernández, candidato de Vox a la presidencia de la Junta, junto a otros miembros de las listas electorales para los comicios del 21 de diciembre.
Según Vázquez, Extremadura ha sido ‘años abandonada por el bipartidismo, da igual que Madrid gobierne el PP que el PSOE’. Además, criticó políticas como el ‘fanatismo climático que arruina a los entes del campo’ en la región, la ‘invasión migratoria que produce que desde el año 2017 se hayan aumentado las agresiones sexuales a mujeres en un 460%’ e ‘ideología de género’, tras conocer que en las listas de María Guardiola figura Nélida Martín, ex secretaria de Igualdad del PSOE, ocupando el puesto 9 en la candidatura de Cáceres. ‘Son exactamente lo mismo y los extremeños tienen derecho a saberlo’, afirmó.
Vázquez también destacó que las políticas del PSOE en el siglo XXI han sido plenamente adoptadas por María Guardiola, lo que en su opinión contribuye a la inseguridad en Extremadura. Sin un ‘cambio absoluto en las políticas’, advirtió, ‘todo irá a peor’ en los próximos años.
Finalmente, Vázquez subrayó la necesidad de ‘revertir toda la política criminal’ para proteger a las futuras generaciones y evitar escenarios como en Francia, donde según él, ‘se violan 90 niñas al día’. ‘No quiero detener violadores, quiero evitar que los violadores violen quiero proteger a esas niñas’, concluyó, comprometiéndose a cambiar las leyes para que ‘el que toque a una niña no vuelva a ver la luz del día en libertad’.