Un total de 113 barcos pesqueros con puerto base en Galicia registraron en 2024 apagones puntuales en sus sistemas de geolocalización, una práctica que, según la organización ecologista Oceana, “dificulta la transparencia del sector” y favorece la pesca irregular al incumplir “sistemáticamente” la normativa vigente.
De acuerdo con los datos recabados por la ONG y consultados por Europa Press, entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2024 estas embarcaciones que operan desde puertos gallegos acumularon cerca de 19.000 horas —equivalentes a 791 días— con los equipos desconectados, lo que supone una media de 27,8 horas de navegación sin identificación activa.
En un informe reciente en el que detalla esta situación, la entidad explica que los sistemas de identificación automática (SIA) de los buques están diseñados para hacer rastreables los movimientos de las embarcaciones y que su uso “saca a la luz conductas ilegales y desincentiva prácticas de pesca nocivas”. La desactivación de estos dispositivos, apunta Oceana, genera el efecto contrario al facilitar actividades opacas.
Por este motivo, la ONG ha presentado una denuncia formal ante la Dirección General de la Marina Mercante contra 50 pesqueros españoles que, según sostiene, “reiteradamente” desconectaron sus sistemas de identificación. Fuentes próximas al expediente señalan que la Dirección General ha recibido la queja y que el organismo “iniciará las investigaciones pertinentes”.
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, del que depende la Marina Mercante, no ha respondido a las cuestiones planteadas por Europa Press acerca de cómo se controla en la práctica el cumplimiento de estas obligaciones de geolocalización por parte de la flota.
Apagones frente a la costa gallega
Otra documentación consultada por Europa Press revela que, solo frente al litoral de Galicia, en 2024 un total de 54 buques con puerto base en la comunidad apagaron sus sistemas de geolocalización, acumulando casi 2.500 horas —104 días— en los que su posición fue desconocida.
En el conjunto de España, el número de barcos con actividad vinculada a Galicia que mantuvieron desconectado el SIA durante más de 3.600 horas (150 días) asciende a 69. A ello se suman otros 88 pesqueros españoles que faenaban frente a la costa gallega y que también fueron identificados por realizar apagones, con un volumen de horas sin señal similar: más de 3.600 horas (150 días) con el sistema inactivo.
Para Oceana, estas interrupciones en la transmisión de la señal plantean “serias preocupaciones” sobre un posible incumplimiento continuado de las normas. La organización recuerda que, en términos generales, los cortes de señal “deben ser debidamente comunicados y justificados a las autoridades competentes”.
Cómo funciona el sistema SIA
La científica marina de Oceana, Helena Álvarez, explica a Europa Press que mantener el SIA desconectado no implica necesariamente que el barco sea totalmente indetectable en el mar, pero sí reduce de forma relevante la precisión del seguimiento.
Según detalla, este sistema emite una señal “mucho más frecuente”, de modo que el posicionamiento del buque es mucho más exacto. Mientras otros equipos de geolocalización envían la ubicación cada una o dos horas, el SIA lo hace “cada pocos segundos o minutos”, lo que permite un control más “exhaustivo” de la actividad pesquera.
Álvarez destaca además que el SIA es de acceso público, lo que “permite que desde asociaciones, de asociaciones civiles y a nivel científico y periodístico se pueda acceder a esos datos” a través de plataformas abiertas. “Ya que todos tienen acceso a esas informaciones, la transparencia es mucho mayor”, remarca la experta.
Galicia, entre las zonas con más desconexiones
En su denuncia ante la Dirección General de la Marina Mercante, Oceana concluye que la franja marítima gallega se sitúa entre las áreas de España donde los pesqueros nacionales apagan con mayor frecuencia sus sistemas de geolocalización.
Además de Galicia, la ONG identifica el Golfo de Bizkaia como otro punto relevante de desconexiones de SIA. El estudio también menciona focos adicionales, aunque de menor intensidad, próximos al Estrecho de Gibraltar y en el Mar de Alborán.
El informe pone el foco en un pesquero concreto, no identificado, que operó frente a la costa gallega y que a lo largo del año pasado habría registrado más de 120 cortes en su geolocalización. En este caso, la señal se interrumpía durante periodos de entre seis y 17 horas, en recorridos de entre 20 y 80 kilómetros, dentro de las zonas económicas exclusivas (ZEE), es decir, la franja marítima en la que el Estado ejerce “derechos especiales” sobre la exploración, explotación y gestión de recursos.
Según Oceana, el “patrón recurrente de desactivación del SIA al salir de puerto y la reactivación más lejos de la costa puede indicar una ocultación intencional de la actividad pesquera en lugar de un fallo técnico”.
Riesgos para el sector y para el consumidor
En declaraciones remitidas a Europa Press, la Consellería do Mar subraya que “la pesca ilegal es una de las prácticas que más perjudica la rentabilidad de la actividad pesquera y que pone en riesgo el futuro del sector”.
El departamento autonómico advierte también de que estas actividades suponen una amenaza para el consumidor, al introducir en el mercado productos por canales irregulares que “no garantizan las condiciones sanitarias necesarias para su consumo, comprometiendo así la salud pública”.
Mar asegura que destina “todos los recursos propios disponibles —especialmente a través del Servizo de Gardacostas de Galicia— empleando medios humanos y materiales, tanto aéreos, terrestres como marítimos, para perseguir y desarticular este tipo de actividades”. Añade que este trabajo se refuerza con una “intensa colaboración” con otros cuerpos y fuerzas de seguridad, como la Guardia Civil y los servicios de inspección de la Secretaría General de Pesca, competente en aguas exteriores, “dado que las competencias autonómicas se circunscriben exclusivamente a las aguas interiores”.
Ante los casos detectados por Oceana, la Xunta recuerda que, en materia de navegación, la autoridad responsable es la Dirección General de la Marina Mercante, dependiente del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, mientras que la Secretaría General de Pesca, integrada en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, es la que gestiona la actividad pesquera en la Zona Económica Exclusiva (ZEE).
Por ello, el Ejecutivo gallego reivindica y afirma haber “defendido firmemente” la necesidad de combatir la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, mediante el refuerzo de los dispositivos de vigilancia y control.










