La sexta adenda al convenio de colaboración entre el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa) para ejecutar obras de modernización y consolidación de regadíos de interés general del Estado implicará una inversión pública de 96,8 millones de euros e incluye siete proyectos en Extremadura, según publica el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Este nuevo acuerdo incorpora la realización de 23 actuaciones adicionales de modernización de regadíos, en las que el Ministerio destina 87,5 millones de euros. Asimismo, se recogen diversas intervenciones dentro del tercer periodo intercampaña 2025-2026 del plan de actuación orientado a la reparación de elementos de infraestructuras ya construidas y afectadas por vicios ocultos, con un presupuesto de 9,3 millones de euros.
Las obras previstas en la adenda, firmada el pasado 9 de diciembre, se financiarán con cargo al Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader), que aporta 83,8 millones de euros, y a las comunidades de regantes, que contribuyen con 86,6 millones. De este modo, la inversión conjunta para las 23 nuevas intervenciones asciende a 258 millones de euros.
En cuanto a su distribución territorial, 12 de las nuevas obras encomendadas a Seiasa se ubican en Andalucía, con una inversión total de 141,3 millones de euros; tres en Castilla y León, por 64,2 millones; siete en Extremadura, con 42,4 millones de euros, y una en Castilla-La Mancha, dotada con 10 millones de euros.
La aportación de fondos europeos y la integración del programa en el Plan Estratégico de la Política Agraria Común (PAC) evidencian el respaldo de la Unión Europea a la modernización de las zonas regables.
Con esta ampliación del capital social de Seiasa, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación reafirma su apuesta por la modernización de los regadíos y subraya que estas inversiones se consideran prioritarias dentro de la política agraria del Gobierno en la actual legislatura, al entender que un riego sostenible es esencial para el presente y el futuro de las producciones agrícolas.