Agrupaejido, firma especializada en la comercialización y distribución de frutas y hortalizas, ha vuelto a integrar en la plantilla a los empleados de su centro de trabajo de La Redonda, en El Ejido (Almería), después de retirar el expediente de regulación de empleo (ERE) iniciado el pasado 7 de noviembre y de que, al concluir el periodo de consultas, quedara sin efecto para ellos el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) aprobado el 18 de septiembre con una duración prevista de dos años.
Fuentes sindicales y de la propia plantilla han indicado a Europa Press que la compañía cursó un llamamiento a los trabajadores de su principal planta de manipulado para que regresaran durante la pasada semana a los puestos que habían ido dejando de forma escalonada desde finales de septiembre y que, en no pocos casos, les habían obligado a buscar alternativas laborales.
Pese a esa reincorporación, el centro continúa prácticamente sin “trabajo efectivo”, según describen los empleados. “El miércoles entraron 42 cajas de pimientos y el jueves ninguna”, han señalado desde la plantilla, que afirma no tener explicación sobre las razones por las que la empresa ha renunciado al ERE que en un principio justificó por motivos económicos y productivos.
El ERE, que contemplaba una indemnización de 20 días por año de servicio, se comunicó a la plantilla apenas seis semanas después de que la mercantil pusiera en marcha un ERTE de dos años que afectaba al 95 por ciento de los empleados de todos sus centros, es decir, alrededor de 147 personas, aunque dicho expediente fue impugnado ante la jurisdicción social por la representación de los trabajadores.
En relación con este conflicto, el Juzgado de lo Social número 1 de Almería dictó el pasado 28 de noviembre un auto firme en el que se acotaba el alcance del ERTE a partir de los acuerdos suscritos entre UGT, CSIF, CCOO y Agrupaejido, reduciendo de forma significativa el periodo y el ámbito de suspensión de las relaciones laborales inicialmente planteado por la empresa.
En lo que respecta a la plantilla de La Redonda, la resolución judicial establecía mantener la suspensión colectiva de todos los contratos incluidos en el ERTE suspensivo decidido de forma unilateral por la empresa hasta el 9 de diciembre, fecha en que concluía el periodo de consultas del ERE del que finalmente se ha desistido.
Por otra parte, el mismo auto limita hasta el 31 de marzo de 2026 la vigencia del ERTE para el personal vinculado al centro de producción de Las Marinas, en Roquetas de Mar. La compañía queda obligada a informar al comité de empresa de este centro sobre la apertura de un periodo de consultas de un ERE, como máximo, el 1 de marzo de 2026, con un mes para negociar y adoptar una decisión que “nunca podrá ir más allá del día 31 de marzo de 2026”.
La plantilla de Agrupaejido ya se concentró el pasado 1 de octubre ante las instalaciones de la empresa en protesta por la aplicación de un ERTE sin acuerdo previo con los trabajadores, ante la “incertidumbre” generada por una medida que interpretaban como un “cierre patronal” y en un contexto en el que la compañía arrastra importantes deudas con los agricultores por la compra de sus cosechas.
Los representantes de los trabajadores ya habían expresado sus sospechas de que, mediante el ERTE, la dirección buscara vaciar las instalaciones para facilitar la enajenación de determinados activos, entre ellos el almacén de La Redonda, con el objetivo de cubrir parte del pasivo acumulado dentro del plan de viabilidad que permitió a la empresa evitar el concurso de acreedores del que salió en 2023 tras siete años sometida a este proceso.