El Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla, someterá a aprobación en el Pleno municipal el Plan de Acción por el Clima y la Energía Sostenible (Paces), descrito como una estrategia “imprescindible” que sitúa al municipio en línea con el Pacto de los Alcaldes, la “mayor iniciativa europea de acción climática”, según palabras de Luisa Campos, delegada de Monumento Natural, Medio Ambiente y Sostenibilidad.
Desde el Consistorio se ha emitido que el Paces, tras un “diagnóstico exhaustivo” sobre los efectos del cambio climático en la localidad, es un “documento sólido” que identifica y aborda riesgos significativos como el aumento de temperaturas y la variabilidad en las precipitaciones, además de las recurrentes inundaciones cerca del río Guadaíra. Estas condiciones exigen medidas urgentes para preservar el medio ambiente y la calidad de vida urbana.
Campos ha resaltado la necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40% para el año 2030, con el objetivo de “aumentar nuestra resiliencia y garantizar una energía sostenible y accesible para toda la ciudadanía”. El plan se articula en torno a “tres grandes programas”. El primero, centrado en la mitigación y transformación energética, incluye 25 medidas para “reducir las emisiones y acelerar la transición hacia un modelo energético más eficiente y renovable”, lo cual supondrá una disminución de 665.279 toneladas de CO2 y un ahorro de más de siete millones de MWh en energía.
El segundo bloque del plan se enfoca en la adaptación al cambio climático, protegiendo la ciudad de impactos ya inevitables como “calor extremo, lluvias torrenciales y sequía”. Se prevé la implementación de protocolos contra temperaturas extremas y el fortalecimiento de la gestión del agua y la vegetación para mejorar la eficiencia hídrica y el confort urbano.
El tercer bloque, centrado en la comunicación, educación y participación, busca fomentar la conciencia y participación ciudadana, así como combatir la pobreza energética, siendo “fundamentales para implicar a toda la sociedad en la acción climática local”.
Campos ha subrayado que con la aprobación del Paces, el municipio reafirma su “compromiso con un futuro más seguro, más eficiente energéticamente y respetuoso con el entorno”, marcando un “paso clave” para proteger el patrimonio natural y mejorar la vida de los alcalareños, preparando a la ciudad para los desafíos actuales y futuros.
