La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) ha celebrado este lunes en El Barco de Ávila una jornada técnica centrada en la situación epidemiológica de España ante la dermatosis nodular contagiosa (DNC) y la “creciente presión” que se vive en la frontera con Francia.
Según ha detallado la OPA, el encuentro, desarrollado en el Espacio Cultural de El Barco de Ávila, ha congregado a “expertos de primer nivel” en sanidad animal junto a profesionales del sector ganadero. Durante la sesión se han revisado el escenario epidemiológico actual, los riesgos concretos para las explotaciones y las medidas de control, vigilancia y erradicación previstas dentro del marco normativo comunitario.
El primero en intervenir ha sido el veterinario y catedrático de Sanidad Animal de la Universidad de Castilla-La Mancha, así como investigador del IREC-CSIC, Christian Gortázar. En su ponencia ha presentado la DNC como una enfermedad emergente y ha explicado su origen, las vías de transmisión, los signos clínicos, su distribución geográfica y los elementos que impulsan su propagación en el contexto actual.
Posteriormente ha tomado la palabra Germán Cáceres, funcionario del Cuerpo Nacional Veterinario y jefe del Área de Epidemiología de la Subdirección General de Sanidad e Higiene Animal y Trazabilidad del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Cáceres ha repasado la evolución del brote de DNC en la Unión Europea y en España a lo largo de 2025, así como las estrategias de control, vigilancia, vacunación y erradicación que se están llevando a cabo para contener el avance de la enfermedad.
A lo largo de la jornada se ha puesto de relieve la inquietud que existe entre los ganaderos españoles, en especial tras los focos detectados en la provincia de Gerona y, de forma muy significativa, por la evolución de la DNC en Francia, donde se han confirmado más de un centenar de brotes desde el pasado mes de junio.
La situación en los departamentos franceses próximos a la frontera española ha provocado “una fuerte tensión social”, con protestas y cortes de carreteras organizados por ganaderos franceses, que denuncian los sacrificios obligatorios de animales y reclaman una vacunación masiva, han indicado desde Asaja.
En este escenario, ha recordado la OPA, las autoridades francesas han puesto en marcha una campaña de vacunación de emergencia que abarcará a cerca de un millón de bovinos en el suroeste del país. El sector valora esta decisión como una alternativa al sacrificio de rebaños completos, aunque también la interpreta como una muestra de la gravedad del problema y de la obligación de reforzar la prevención en las zonas limítrofes.
El presidente provincial de Asaja, Joaquín Antonio Pino, ha incidido en la relevancia de la información, la formación y la anticipación, especialmente en una provincia donde el vacuno tiene un peso determinante. Ha defendido que los ganaderos dispongan de datos directos sobre la evolución de la enfermedad, los protocolos de respuesta y las medidas de bioseguridad, con el propósito de evitar alarmismos, pero sin relajar la vigilancia.
Por este motivo, ASAJA ha reiterado su voluntad de seguir ofreciendo al sector “información rigurosa y actualizada” y de reclamar ante las administraciones una política sanitaria que conjugue la eficacia epidemiológica con la protección del tejido ganadero y la sostenibilidad económica de las explotaciones. La organización ha adelantado, además, que continuará impulsando jornadas técnicas como la de este lunes, convencida de que la prevención y el conocimiento son “herramientas clave” para hacer frente a los desafíos sanitarios presentes y futuros de la ganadería.