La Consejería de Medio Rural y Política Agraria ha llevado a cabo este año la captura y seguimiento de seis osos pardos que mostraban una clara habituación a áreas con presencia humana o habían ocasionado daños repetidos en varios núcleos del suroccidente de Asturias, con la finalidad de alejarlos de los pueblos y minimizar los conflictos con los vecinos.
Las intervenciones se llevaron a cabo en Tabladiel.lu, Chanu, Pousada de Rengos, Los Eiros y Pontarás, en el concejo de Cangas del Narcea, además de en Funduveigas, en el municipio de Degaña. Todos los animales fueron capturados, marcados y soltados de nuevo en enclaves de montaña apartados de las poblaciones, según detalla el Principado en una nota informativa.
La primera captura se realizó en marzo en Tabladiel.lu, donde se inmovilizó a un macho adulto de 220 kilos, conocido como “Saladín”, después de comprobarse su presencia en un dispensador de pienso para terneros. El oso fue liberado en la braña de Saladín el 17 de marzo.
En mayo, en Chanu, se procedió a la captura de una hembra subadulta de 60 kilos, llamada “Clara”, tras varios intentos fallidos de ahuyentamiento mediante petardos. La osa fue soltada en el puerto del Connio una vez marcado el ejemplar.
El 19 de junio, en Funduveigas, se capturó a “Matín”, un macho adulto de 160 kilos que había ocasionado destrozos en colmenares, y fue reintroducido en la antigua carretera del puerto del Rañadoiro.
En septiembre, en Pousada de Rengos, se localizó y capturó al osezno “Rengos”, que se estaba alimentando de restos de comida en una explotación minera. El ejemplar fue trasladado al Centro de Recuperación de Sobrescobio para su revisión veterinaria y posteriormente liberado en la braña de Siella. Ese mismo día, en Los Eiros, se capturó a “Eiros”, un macho adulto de 170 kilos que había atacado un colmenar profesional, y fue liberado en el valle del Cabreiro.
La última actuación se produjo el 30 de septiembre en Pontarás, donde se capturó a “Portos”, un macho adulto de 240 kilos que había sido observado comiendo fruta en las inmediaciones del núcleo habitado. Tras su marcaje, fue soltado en el hayedo de Reigada.
Estas operaciones fueron desarrolladas por equipos del Instituto Mixto de Investigación en Biodiversidad (IMIB), la Fundación Oso Pardo, la Fundación Oso Asturias, personal técnico del Principado y agentes medioambientales, con el propósito de garantizar tanto la seguridad y el bienestar de los osos como la de la ciudadanía.
Como complemento, el Gobierno de Asturias ha colocado cubrecontenedores en áreas con presencia de osos y ha facilitado pastores eléctricos a residentes y ganaderos para proteger huertos, colmenares y cuadras. Asimismo, participa en el proyecto europeo Life Coexistencia entre humanos y osos, dotado con 4,2 millones de euros y financiado en un 75% por la Unión Europea.
La Consejería insiste en que, si se detecta la presencia de un oso en zonas urbanas o periurbanas, se debe avisar de inmediato al 112 Asturias para que intervenga la Patrulla Oso.