El presidente de la Diputación de Alicante, Toni Pérez, ha acudido este viernes a la huerta de Daya Nueva para participar en el corte simbólico con el que se da por iniciada la campaña de recolección de la alcachofa de la Vega Baja, un cultivo al que ha definido como “la joya de la huerta de la comarca y del resto de la provincia”.
Para esta temporada se estima una cosecha en torno a las 30.000 toneladas, lo que supone alrededor de un 10 por ciento más que el ejercicio anterior. La corporación provincial ha subrayado en un comunicado que estas previsiones son “positivas” para el sector.
Durante su intervención, el máximo responsable de la Diputación ha reiterado el respaldo de la institución a este producto y a la defensa de los recursos hídricos de la zona. “Este arranque marca el inicio de la temporada 2025/2026, en la que confiamos que nuestra alcachofa vuelva a demostrar por qué es un producto con historia, tradición y calidad, cultivado en una tierra generosa que durante décadas ha dado forma a la identidad agrícola de la Vega Baja”, ha indicado.
Pérez ha puesto en valor, igualmente, la figura de Antonio Galindo, hasta ahora presidente de la Asociación Nacional de Alcachofa, quien ha aceptado el nombramiento de padrino de honor de la campaña. A este respecto, ha recalcado que, gracias a su trayectoria y dedicación, “su figura añade prestigio y refuerza nuestro deseo de visibilizar la alcachofa de la Vega Baja no solo a nivel local y provincial, sino también nacional”.
El presidente ha incidido en que la ceremonia de inicio de la campaña va más allá del gesto simbólico, ya que “el trabajo de muchos agricultores, cooperativas y personas comprometidas con el campo, con la agricultura, con la defensa de nuestros intereses hídricos y adquiere un significado especial este año para reafirmar nuestra apuesta por la calidad, la tradición y el futuro de la producción hortofrutícola en la comarca”.
En la parte final de su intervención, Toni Pérez ha expresado su deseo de que este comienzo oficial “recuerde que cada alcachofa que llega a la mesa lleva consigo una historia detrás, mucho esfuerzo colectivo y el sabor de nuestra tierra”, al tiempo que ha animado a seguir apostando por su consumo, “que destaca especialmente por sus propiedades nutricionales”.
El dirigente provincial ha recordado también que este cultivo cuenta desde hace años con el respaldo económico de la Diputación mediante distintas líneas de ayuda dirigidas a la Asociación Alcachofa de la Vega Baja del Segura, con el objetivo de reforzar su promoción, su puesta en valor y su difusión en los mercados.
El acto celebrado en Daya Nueva ha reunido, además, a la directora general del Agua y Desarrollo Rural, Sabina Goretti, al alcalde del municipio, Pablo García, al presidente de la Asociación Alcachofa Vega Baja del Segura, Antonio Ángel Hurtado, al padrino de honor, Antonio Galindo, y a otros representantes de la Asociación Alcachofa Vega Baja del Segura.
La alcachofa se mantiene como uno de los cultivos más representativos de la huerta de la Vega Baja y constituye el núcleo hortofrutícola de la comarca. Su producción se concentra, principalmente, en municipios como Orihuela, Almoradí, Callosa de Segura, Pilar de la Horadada, San Miguel de Salinas y Dolores, entre otros términos municipales del entorno.
La marca Alcachofa Vega Baja actúa como un sello de calidad que certifica el esmero en el cultivo y la selección en el campo, garantizando un producto fresco, saludable y de proximidad. Está disponible durante buena parte del año, ya que la campaña se extiende desde noviembre, cuando se recogen las primeras piezas, hasta el mes de mayo.
En la Vega Baja se cultivan distintas variedades de alcachofa, adaptadas al destino comercial y a los gustos del consumidor. Se producen ejemplares de gran calibre y tonalidad violácea, orientados sobre todo a la exportación, y otras piezas de color verde y tamaño algo menor que se comercializan en el mercado nacional y se destinan también a la industria conservera.
