El Pleno del Congreso tiene previsto debatir este martes, 9 de diciembre, una proposición de ley registrada por el PP que persigue que, en escenarios de crisis, se aplique el tipo mínimo autorizado de IVA a la energía y a las adquisiciones necesarias para que los productores puedan desarrollar sus actividades agrícolas, ganaderas o forestales.
Esta iniciativa constituye una de las principales medidas incluidas en la propuesta normativa que se someterá a la votación de toma en consideración y cuyo objetivo es apuntalar el sistema alimentario español como sector estratégico clave de la economía. Para ello, se articula un amplio paquete de actuaciones fiscales orientadas a aliviar los costes de producción en el campo, con la intención de asegurar la viabilidad económica y el futuro de las explotaciones y empresas del sector primario.
En particular, el Grupo Popular plantea una reducción temporal del IVA soportado por todos los agentes del sistema, que repercute directamente en el precio final de los alimentos, tanto en el caso de la energía y los combustibles como en el de las materias primas e insumos imprescindibles para la actividad agraria, que han experimentado importantes “incrementos de precio” para agricultores y ganaderos.
Concesión de ayudas estatales y criterios comunes
Junto a la rebaja fiscal, la formación propone la puesta en marcha de ayudas estatales en forma de “mínimis”, es decir, subvenciones de escasa cuantía, dirigidas a explotaciones de aquellos sectores que atraviesen una situación de crisis y vean comprometida su continuidad en el ciclo productivo.
El PP aspira a fijar criterios homogéneos en todo el territorio nacional para la concesión de estas ayudas ante situaciones de vulnerabilidad similares, de manera que dichos criterios sean conocidos de antemano por los potenciales beneficiarios.
La proposición establece, no obstante, que estos apoyos se mantendrán mientras se desarrolla, en el marco del sistema de seguros agrarios combinados, un seguro de estabilización de ingresos que permita gestionar los riesgos vinculados a los ingresos procedentes de la actividad agraria.
Además, el texto incluye la creación de un sistema de seguimiento integral de los mercados y de las condiciones de los intercambios comerciales, que sería diseñado y gestionado por los ministerios de Agricultura y Economía, en coordinación con las comunidades autónomas.
Refuerzo del seguro agrario y cambios normativos
En el ámbito de la gestión del riesgo, el PP plantea que el seguro agrario combinado incorpore la opción de cubrir nuevos riesgos derivados de la volatilidad de los mercados y que se refuerce su sostenibilidad técnica y económica, con el fin de garantizar las coberturas que se ofrecen a los agricultores asegurados.
Asimismo, la propuesta contempla la modificación del artículo 27.3 de la ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular, con el objetivo de adaptar el tratamiento de los residuos vegetales al criterio general fijado en la norma para el conjunto de residuos.
En materia medioambiental, el PP propone que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico lleve a cabo los estudios y trabajos necesarios para facilitar el acceso de los agricultores al mercado de carbono, de forma que agricultores y ganaderos puedan percibir una compensación por la captura y almacenamiento de carbono en tierras y cultivos.
Bajada de impuestos a alimentos básicos
En la misma sesión plenaria, el grupo parlamentario popular defenderá una proposición no de ley en la que insta al Gobierno a reducir el IVA de diversos productos de alimentación como los huevos, la leche, los productos frescos, las carnes, los pescados y las conservas.
Se trata de una reclamación que el partido viene formulando desde el repunte inflacionista que se produjo tras la pandemia de 2020. La formación advierte de que en España se encadenan ya cinco años consecutivos en los que los precios “no han dejado de subir”, con un encarecimiento acumulado del 22,7% hasta octubre de este año. En el caso de los alimentos y bebidas no alcohólicas, el incremento alcanza el 34,1%.
Por este motivo, el PP propone bajar del 4% al 0% el IVA de los huevos, la leche y los productos frescos, y reducir ese impuesto del 10% al 4% en las carnes, pescados y conservas, con la finalidad de reactivar el consumo de estos alimentos que muchas familias “han tenido que reemplazar por alimentos ultraprocesados”.











