La cooperativa oleícola San Antonio, ubicada en Alcalá la Real (Jaén), ha concluido la modernización de sus instalaciones después de una inversión que supera los 2,3 millones de euros. Este desembolso económico ha permitido incrementar la eficiencia energética y la capacidad de producción de aceite de oliva de la entidad.
El acto de inauguración de estas mejoras se celebró este viernes, contando con la presencia de Marino Aguilera, alcalde de la localidad, y Ramón Fernández-Pacheco, consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, así como de los directivos de la cooperativa, que agrupa a más de 700 socios.
Las obras han incluido una reforma total de las instalaciones de producción, que abarca desde la renovación del edificio y cubiertas hasta la reorganización de espacios y ampliación de la maquinaria. También se han actualizado los sistemas eléctricos y de automatización y mejorado aspectos como la accesibilidad, la señalización y los acabados internos.
Juan Pulido, presidente de la SCA San Antonio, destacó que la modernización es un claro compromiso con la eficiencia energética y el cuidado medioambiental, buscando siempre la obtención de aceites de oliva de alta calidad.
Además, Pulido rememoró la trayectoria de más de 60 años de la cooperativa, iniciada por un grupo de emprendedores que buscaban hacer rentable su labor en el campo. Hoy día, la cooperativa reúne a más de 700 socios y gestiona 4.500 hectáreas de olivar de donde se obtienen aproximadamente 20 millones de kilos de aceituna, provenientes de la Sierra Sur de Jaén y los Montes Orientales de Granada.
El alcalde aplaudió la apuesta de la cooperativa por la innovación y el futuro del olivar tradicional. «En Alcalá, donde el terreno es difícil y los olivares exigen un gran esfuerzo físico, resulta esencial que la tecnología más moderna se ponga al servicio de este cultivo milenario», señaló.
Por su parte, el consejero de Agricultura resaltó que «estas instalaciones son ejemplo de que las subvenciones de la Junta de Andalucía llegan al territorio y se traducen en mejoras reales para las cooperativas y las industrias agroalimentarias». De la inversión total de 2,3 millones, la Junta aportó más de 630.000 euros a través de la convocatoria 2023 de ayudas a Industrias Agroalimentarias, dentro del Programa de Desarrollo Rural de Andalucía 2014-2020.
Fernández-Pacheco subrayó que la inversión mejora la eficiencia energética, la capacidad productiva y la calidad del aceite, impulsando la competitividad y sostenibilidad de la cooperativa, además de contribuir al mantenimiento del empleo rural y la fijación de población en la región.
Finalmente, el consejero adelantó una nueva convocatoria de ayudas para la modernización de la industria agroalimentaria andaluza, con un presupuesto de 88 millones de euros, destinados a pequeñas y medianas empresas (66 millones) y a grandes empresas (22 millones) que operan en el sector agrícola y alimentario de Andalucía.
