La consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, Amaia Barredo, ha avanzado que el próximo lunes el Gobierno vasco planteará en la reunión del Rasve (Red de Alerta Sanitaria Veterinaria) la inmunización preventiva de toda la cabaña bovina de Euskadi frente a la dermatosis nodular contagiosa.
En declaraciones a Europa Press, Barredo ha realizado esta reflexión después de que este viernes haya entrado en vigor la suspensión de ferias y certámenes con presencia de animales como respuesta a la dermatosis nodular contagiosa (DNC), así como el refuerzo de las exigencias para el movimiento del ganado y las medidas de bioseguridad.
La consejera ha rememorado que hace alrededor de un mes se relajaron las restricciones, ya que el foco se concentraba en Cataluña y se consideraba que la situación estaba bajo control. Sin embargo, ha explicado que se ha optado por volver a endurecer la prevención tras confirmarse nuevos casos en cuatro regiones de Francia, "a escasos 90 kilómetros de Euskadi".
Ante esta proximidad de los focos franceses, Amaia Barredo ha subrayado que se ha decidido intensificar la vigilancia, centrando las actuaciones principalmente "en la suspensión de los movimientos y en la bioseguridad de las explotaciones".
En este contexto, Barredo ha reiterado su apuesta por la vacunación preventiva de todo el ganado bovino de Euskadi, una demanda que el Ejecutivo autonómico llevará de nuevo a la reunión del Rasve (Red de Alerta Sanitaria Veterinaria) convocada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacion (MAP).
La consejera ha recordado que en la última sesión de este órgano, Euskadi, junto con Navarra y Aragón, ya planteó la necesidad de vacunar a toda la cabaña bovina. No obstante, la propuesta del Ministerio fue concentrar esa vacunación preventiva en una franja paralela a los Pirineos.
Según ha detallado, ese diseño dejaría "sin vacunar a toda la parte más mediterránea y más hacia el oeste". "Bizkaia, por ejemplo, y gran parte de Álava sin vacunar. En Navarra pasaría parecido, toda la parte más hacia el oeste y hacia el sur y en Aragón igual", ha puntualizado.
Barredo ha explicado que este lunes volverá a reunirse el Rasve y que, en este marco, se les está preguntando, en el caso de Gipuzkoa, qué zona concreta se pretende incluir en la vacunación. Ha indicado que los servicios veterinarios están ultimando ese estudio, pero insisten en que "lo lógico" sería inmunizar a la totalidad de la cabaña bovina de la comunidad autónoma "para facilitar el manejo, el seguimiento y el control y los movimientos entre las explotaciones de cada una de las comunidades autónomas".
Por ello, el Gobierno vasco reclamará en la reunión que la vacunación se extienda a toda la comunidad autónoma. Con todo, Barredo ha admitido que habrá que aguardar al resultado, ya que existe un "número limitado de vacunas" y desconoce si esa limitación "está condicionando que el ministerio no abra más la vacunación a toda la comunidad autónoma o es otro aspecto".
En relación con Gipuzkoa, la consejera ha calculado que podrían ser alrededor de 45.000 reses las que entrarían en la campaña de vacunación. Ha añadido que en la cita del lunes se valorará la propuesta del Ministerio de inmunizar únicamente una franja —en la que se incluiría este territorio— y "ver si se ciñe a esas áreas o se amplía".
Por otro lado, Barredo ha destacado que las instituciones vascas mantienen un contacto constante con el sector ganadero, que dispone de "vías abiertas de comunicación" con las tres diputaciones forales.
Respecto a la suspensión de ferias y eventos con animales, ha explicado que, aunque en estas fechas navideñas la programación de este tipo de actos es menor, todavía quedaban algunas citas con presencia de ganado. Además, al prolongarse la medida hasta finales de febrero, también podría repercutir en ciertos carnavales en los que participan animales.
La consejera ha señalado igualmente que, por el momento, no se han abordado posibles ayudas específicas al sector, ya que en Euskadi "no hay focos a día de hoy".
Ha precisado que las principales pérdidas se producirían en caso de detectarse un foco y verse obligados a sacrificar animales. En esas circunstancias, una parte del perjuicio económico se cubre mediante seguros y, además, se pueden poner en marcha "líneas extraordinarias de ayudas para situaciones de esta envergadura". "Otra cosa es que esto desborde también, aparte de esas líneas de ayudas y haya que entrar a complementarlas", ha concluido.