La Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) ha decidido en Sevilla aumentar en un 19,3% la cuota de captura de atún rojo para el Atlántico oriental y el Mediterráneo durante los próximos tres años. Esta resolución se tomó después de una semana de deliberaciones con más de 60 países, respaldada por estudios que evidencian una mejora continua en las poblaciones de esta especie.
El Grupo Ricardo Fuentes, con sede en Cartagena, mencionó que “las presiones por parte de EEUU para desplazar parte de la cuota del Atlántico Este y Mediterráneo a la cuota del Atlántico Oeste, sin contar con base científica confirmada, ha puesto en peligro el normal desarrollo de la reunión y retrasado mucho la decisión final, que finalmente se ha tomado tomando en cuenta las recomendaciones de los científicos”, según declararon desde la empresa.
El impacto de este incremento para España “está aún por determinar”, ya que, aunque la ICCAT ha aprobado un aumento del 19,3% en la cuota, sólo un 17,03% de esta sería asignada a la UE debido a la incorporación de nuevos actores en el reparto o al aumento otorgado a regiones con cuotas previamente menores, como han indicado desde el sector.
En diciembre se celebrará el Consejo de TAC y cuotas de la UE, que establecerá cómo se distribuyen estas entre los estados miembros, siendo España poseedora del 31,5% del total europeo.
“El incremento aprobado refleja el éxito de los esfuerzos de recuperación realizados durante años y garantiza una gestión sostenible del atún rojo a largo plazo”, indicó David Martínez, de Ricardo Fuentes. Las cifras acordadas son una oportunidad para “responder a la demanda creciente de este producto” y ahora se busca que el reparto dentro de la UE “respete el peso histórico que España siempre ha tenido en esta pesquería”, añadió Martínez.
La decisión “tendrá un impacto directo” especialmente en Cartagena y en toda la Región de Murcia, según la compañía. “Desde Cartagena exportamos atún rojo a más de 40 países y el producto se ha convertido en una referencia para algunos de los mercados más exigentes como Japón o Estados Unidos. Esto tiene un impacto social y económico muy relevante, no solo por la actividad directa que realizamos sino también por todo lo que implica en actividades auxiliares tanto en mar como en tierra”, concluyeron.
