La estrategia de vacunación contra la dermatosis nodular contagiosa en España no incluye a Galicia en sus fases iniciales, priorizando las áreas más próximas a los brotes identificados en Cataluña, según ha indicado Emilio García Muro, director general de Sanidad de la Producción Agroalimentaria, en una conferencia telemática con periodistas. Se busca una implementación gradual de la vacuna, extendiéndose desde los focos existentes para maximizar su efectividad, bajo el modelo descrito como “mancha de aceite”.
La enfermedad, causada por un virus del género capripoxvirus, provoca síntomas severos en el ganado bovino, incluyendo fiebre y nódulos tanto en la piel como en órganos internos. La transmisión ocurre a través de la picadura de insectos como mosquitos y tábanos. Las bajas temperaturas del invierno contribuirán a disminuir la actividad de estos vectores, lo que es un factor clave en la planificación de la vacunación, ha explicado García Muro.
Respecto a la posibilidad de que el virus se propague a Galicia, el director ha comentado que en caso de necesidad, las vacas deberán ser sacrificadas en la misma explotación donde se encuentren. La región se prepara para vacunar aproximadamente a medio millón de cabezas de ganado en las próximas etapas del programa, que también cubrirá casi 3.000 explotaciones en Cataluña y Aragón, con el fin de contener la propagación del virus a otras comunidades.
PLAN DE VACUNACIÓN
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha desarrollado un plan de vacunación que ha sido remitido a la Comisión Europea, ampliando la cobertura a nuevas áreas tras confirmarse 18 focos en Girona. La autorización de la CE es crucial para la implementación de este plan, que incluye la compra de vacunas por un valor de 660.000 euros para asegurar una reserva de contingencia adecuada.
En un reciente encuentro del Comité de la Red de Alerta Sanitaria Veterinaria de España, se han revisado las medidas de bioseguridad y se ha insistido en la importancia de reportar cualquier sospecha de la enfermedad para su rápida detección y control. Además, se ha evaluado la situación de la influenza aviar, con medidas específicas en regiones afectadas y un seguimiento continuo de los riesgos asociados a la migración de aves silvestres.
















