Ganaderos y agricultores catalanes que este lunes participan en la tractorada organizada por Unió de Pagesos (UP) han colgado los cuerpos sin vida de un jabalí y un ciervo en la C-17, a la altura de Gurb (Barcelona), como forma de presión a la Generalitat para exigir un control mucho más estricto de la fauna cinegética.
La protesta ha arrancado alrededor de las 9,30 horas con una marcha lenta de tractores con el objetivo de “colapsar” la C-25, el Eje Transversal, con columnas procedentes de Riudellots de la Selva (Girona), Manresa (Barcelona), Cervera y Lleida. Hacia las 12 horas se ha procedido a la lectura de un manifiesto en Cervera (Lleida) y en Gurb.
Durante la mañana, el coordinador territorial de UP Lleida, Néstor Serra, ha recordado que el sector lleva “mucho tiempo avisando sobre la sobrepoblación de la fauna cinegética” y ha reprochado al Govern que no haya atendido sus advertencias hasta la irrupción de la peste porcina africana (PPA), con 27 casos positivos en jabalíes localizados en un radio de 6 kilómetros en el entorno de Collserola (Barcelona).