El conseller de Agricultura de la Generalitat catalana, Òscar Ordeig, ha reclamado que no se alimenten conjeturas sobre el origen de la peste porcina africana (PPA) detectada en el entorno de Collserola (Barcelona). Su llamamiento llega después de que el laboratorio de referencia de la UE remitiera un informe al Gobierno en el que no se descarta que el foco pueda proceder de un laboratorio: “Pido prudencia”.
En una rueda de prensa convocada para actualizar la información sobre el brote, que mantiene los 13 casos positivos en jabalíes muertos anunciados este jueves, el conseller ha subrayado: “Ni confirmamos ni descartamos. Todas las opciones están abiertas y no entraremos en especulaciones. Cuando tengamos resultados avalados por la ciencia, lo compartiremos”.
El informe europeo concluye que todos los virus de PPA que circulan actualmente en los Estados miembros pertenecen a los grupos genéticos 2-28 y no al nuevo grupo genético 29, al que se adscribe el virus detectado en la provincia de Barcelona. Este último es muy parecido al grupo genético 1 que circuló en Georgia en 2007, según ha detallado el Ministerio de Agricultura en un comunicado.
De acuerdo con la información trasladada por el Gobierno, esa similitud ha despertado las sospechas del laboratorio, ya que “los virus, en condiciones naturales, cuando se propagan mediante ciclos de infección en animales sufren en mayor o menor medidas cambios en su genoma”, lo que lleva a los expertos a no descartar que el origen del foco pueda situarse en una instalación de confinamiento biológico.
Pese a ello, Ordeig ha recalcado que estas hipótesis “no son concluyentes” y ha asegurado que el ‘modus operandi’ en Catalunya no variará hasta que existan evidencias científicas sólidas que respalden esa posibilidad. Ha insistido en que las decisiones se tomarán únicamente sobre la base de datos científicos contrastados.
Restricciones ampliadas y posibles sanciones
En paralelo, este viernes el Govern ha decidido ampliar la prohibición de acceso al medio natural que ya estaba en vigor en un radio de 6 kilómetros desde el foco, extendiéndola ahora hasta los 20 kilómetros. Esta nueva delimitación afecta a 91 municipios incluidos dentro del área declarada como infectada.
El conseller ha advertido de que este será un fin de semana “muy complejo” por coincidir con el puente, y ha pedido a la población que respete de forma estricta las recomendaciones y limitaciones fijadas para frenar la propagación de la PPA.
Ordeig ha señalado que “para todo aquel que desatenga las indicaciones de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, tenemos las actas a punto para, si es el caso, los Mossos puedan sancionar a quienes no sigan las restricciones o prohibiciones de acceso al medio natural”. Ha advertido de que el incumplimiento de las normas podrá acarrear sanciones, especialmente en los casos de desobediencia reiterada.
Ha querido dejar claro, no obstante, que las autoridades “no están aquí para poner multas”, y ha explicado que el objetivo principal es garantizar que se respeten las medidas de bioseguridad y las limitaciones de acceso, consideradas esenciales para contener el brote de PPA y proteger tanto a la fauna silvestre como al sector porcino.
