El conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat, Oscar Ordeig, ha señalado que está previsto que este lunes se den a conocer los integrantes del equipo encargado de la auditoría al Insitut d’Investigació i Tecnologia Agroalimentària (IRTA). Este grupo estará compuesto por especialistas en bioseguridad “independientes” procedentes de Madrid, del País Vasco y también del ámbito internacional.
En una intervención en el programa ‘La Hora de la 1’ de TVE, ha precisado que será el director del IRTA, Josep Usall, quien asumirá la coordinación de este equipo de trabajo, que deberá “marcar los pasos” y orientar las investigaciones para determinar con exactitud “qué hay que buscar”.
Ordeig ha añadido que a lo largo de esta semana está previsto que lleguen las muestras que se encuentran en el laboratorio y que se están comparando con las recogidas en los jabalíes de la zona de Cerdanyola del Vallès (Barcelona): “Tendremos información de si coincide el ADN o no coincide, por lo tanto, yo creo que en pocos días tendremos información muy importante”. Según ha subrayado, estos análisis permitirán avanzar en la comprensión del origen y la extensión del foco.
El conseller ha recalcado que “cada día que pasa vamos avanzando, teniendo más información y sobre todo, lo que repito, prudencia, vamos a dejar trabajar a los científicos nosotros nos vamos a guiar siempre por criterios científicos”, insistiendo en que las decisiones del Govern se basarán en la evidencia técnica y en las recomendaciones de los expertos.
Al mismo tiempo, ha apuntado que no se descartan otras hipótesis sobre el origen de la situación y ha querido trasladar un mensaje de tranquilidad y respaldo tanto al sector agroalimentario como al sistema de investigación, que ha calificado de “fundamental” para afrontar este tipo de crisis sanitarias.
Impacto en las exportaciones
En relación con las exportaciones, Ordeig ha trasladado un mensaje de apoyo a los operadores del sector y ha recordado que en Catalunya “el primer sector económico es el agroalimentario”, por lo que, ha reconocido, esta coyuntura va a tener un impacto, textualmente. Ha incidido en que la relevancia de esta actividad económica hace especialmente sensibles las consecuencias de cualquier restricción comercial.
Ha puesto de relieve que el 80% de las exportaciones de porcino catalanas se dirigen a Asia y que, dentro de este continente, el principal destino es el mercado chino, donde actualmente se pueden seguir enviando productos porcinos siempre que procedan de fuera de la provincia de Barcelona. Esta condición marca la capacidad de las empresas para mantener sus ventas exteriores.
“Esto genera un impacto importante porque tenemos en Osona (Barcelona) una cabaña ganadera muy grande”, ha lamentado, aludiendo a la elevada concentración de explotaciones porcinas en esta comarca y a la preocupación existente entre los ganaderos por las posibles repercusiones económicas de la situación.