QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Los pescadores de Baleares califican como “el menos malo de los acuerdos” la posibilidad de mantener en 2026 los actuales días de trabajo en el mar.
Así lo ha señalado el presidente de la Federación Balear de Cofradías de Pescadores (FBCP), Domingo Bonnín, en declaraciones a Europa Press, al valorar el pacto alcanzado en la madrugada de este sábado por los países de la Unión Europea sobre el reparto de cuotas pesqueras en aguas comunitarias. Este acuerdo permite conservar en 2025 los días de faena de la flota española del Mediterráneo en 143 jornadas, siempre supeditado a la continuidad de las medidas de compensación.
Bonnín ha indicado que el sector en Baleares tiene la sensación de “si se viviera un déjà vu”, ya que desde hace cinco años, al cierre de cada ejercicio, se convoca en Bruselas una reunión que se alarga unos dos días y que, en una tercera jornada, concluye con un acuerdo definitivo sobre las cuotas pesqueras para el año siguiente.
De cara a 2026, los días de actividad para la flota del Mediterráneo seguirán fijados en 143. El presidente de la FBCP ha definido este resultado como “el menos malo de los acuerdos”, porque, en lo que ha descrito como “su carta a los Reyes Magos”, su petición a Bruselas habría sido autorizar a los pescadores a faenar “180 días”.
Pese a ello, considera que el pacto sellado en Bruselas en la madrugada del sábado refleja “un cambio de tendencia”, algo que atribuye al “talante” del nuevo comisario de Pesca, ya que, ha recalcado, “con el anterior, un acuerdo así hubiera sido imposible”.
Al mismo tiempo, Bonnín ha subrayado que “tan importante son los días de faena como la forma en la que se distribuyen”, y por ello ha reclamado a Bruselas que regule para “evitar que haya pescadores más conservadores que hacen unos cálculos para la distribución de las jornadas a lo largo de todo el año, para intentar abastecer los mercados de enero a diciembre, que al final acaban viendo como, hace dos semanas, la Secretaría General de Pesca asignó 13 días adicionales para posibilitar que la flota pudiera faenar hasta final de año, y se quedan con más días para faenar que jornadas laborales quedan”.
En cualquier caso, ha remarcado el presidente de la FBCP, “nadie cuestiona el objetivo” de fijar cuotas de pesca, “proteger el recurso”. “Lo que se cuestiona es la forma en que se hace”, ha apuntado, al considerar que “el ‘café para todos’ es lo que mata”, puesto que las flotas del Mediterráneo presentan realidades muy distintas entre sí.
