El Gobierno canario ha expresado su inquietud después de que el Estado plantease la posibilidad de implementar en el archipiélago técnicas de pesca con cerco industrial y jaulas de engorde para atunes y raviles. Esta iniciativa contrasta con las prácticas tradicionales y artesanales que predominan en la región y que están reguladas por normativas específicas que prohíben el cerco industrial.
El director general de Pesca de Canarias, Esteban Reyes, informó el miércoles que el archipiélago está tratando de clarificar los detalles de esta propuesta, de la cual no tenían conocimiento previo. “Si hay un arte que sí está prohibido en Canarias, ese es el de cerco, un arte industrial, y esta es un área o una zona en la que siempre se ha practicado la pesca artesanal”, declaró Reyes a la prensa.
Reyes también señaló que están a la espera de una respuesta oficial del Ministerio para poder definir una postura clara al respecto. “El Gobierno de Canarias se enteró de esa propuesta estando en Sevilla, en una Comisión del ICCAT. Yo estaba presente, y fue una propuesta que se lanza desde el Ministerio, a través de un operador, y el ICCAT, en este caso, ha dicho que no tiene ningún tipo de problemas a la propuesta”, explicó.
El aspecto más alarmante de la propuesta, según Reyes, no radica en la acuicultura, que ya es una actividad consolidada en las islas, sino en la introducción del cerco industrial, una técnica prohibida que podría afectar las prácticas pesqueras locales.
