En el contexto de la reforma del Marco Financiero Plurianual de la UE para 2028-2034, el Gobierno de Aragón, mediante su Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación, ha reiterado su compromiso con el desarrollo territorial y la defensa de los intereses regionales. Durante la Jornada del Programa de Diálogos Locales del Comité Europeo de las Regiones en Logroño, Javier Rincón, consejero del departamento, ha defendido la necesidad de mantener una Política Agraria Común (PAC) sólida y una gobernanza efectiva a varios niveles.
Rincón ha manifestado que «no podemos permitir que la reciente propuesta europea suponga una recentralización de los fondos y una pérdida de autonomía para las regiones». Ha enfatizado que Aragón promueve una «Europa de las regiones», donde la cohesión y la PAC se mantengan como políticas robustas, con un presupuesto adecuado y criterios que reflejen fielmente las realidades demográficas y territoriales.
Además, ha subrayado la importancia de que Aragón conserve un papel activo en las decisiones: «La gobernanza multinivel no puede quedarse en una formalidad. Exigimos capítulos regionales claros, responsabilidad jurídica y financiera propia, y la capacidad de negociar directamente con la Comisión Europea. Solo así garantizaremos que las necesidades de nuestro territorio sean escuchadas y atendidas».
LA PAC COMO PILAR ECONÓMICO Y SOCIAL
El consejero ha remarcado que la PAC trasciende su papel sectorial, constituyéndose como un pilar económico y social vital para la región y una herramienta clave contra la despoblación. La reducción de sus recursos implicaría menos inversión y el cierre de explotaciones familiares, llevando a una Europa más deshabitada.
Finalmente, Rincón ha celebrado los progresos en las negociaciones europeas, mencionando la introducción del «objetivo rural» y el «regional check», pero ha insistido en que estos avances deben ir acompañados de garantías legales sólidas y supervisión democrática multinivel. Desde el departamento se enfatiza que «invertir en el territorio es invertir en Europa. Reforzar Aragón y las demás regiones europeas es fortalecer la seguridad alimentaria, energética y social de toda la Unión y asegurar que ningún territorio quede atrás».
