La sección sindical de UGT-FICA en Cetarsa ha expresado su «preocupación» por las posibles consecuencias que la aprobación del anteproyecto de ley, que modifica la Ley 28/2005 y añade controles adicionales al consumo de tabaco y su regulación, pueda tener para las áreas tabaqueras del norte de Cáceres.
Esta actualización legislativa podría representar «otro aprieto de tuercas al sector productor y transformador» en estas regiones, que agrupan el 98% de la producción nacional de tabaco y han sido fuente de más de 2.100 empleos directos de tiempo completo durante décadas, además de los empleos indirectos, contribuyendo así a la estabilidad demográfica de la zona.
Desde UGT-FICA critican la «doble moral de España y Bruselas» al promover esta nueva normativa después de que España recaudara casi 9.000 millones de euros por impuestos del tabaco en 2024. La producción y transformación del tabaco sostienen el escaso tejido industrial de estas áreas, y en caso de que desaparezca, «no hay ningún cultivo alternativo».
El sindicato también quiere dejar claro que ni el sector productor ni las empresas transformadoras «no siembran fumadores», ya que fumar es una elección «libre y personal».