La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha expresado su satisfacción tras la aprobación de la nueva normativa de comercialización del aceite de oliva para la temporada 2025/26, diseñada para evitar alteraciones del mercado en situaciones de alta disponibilidad de producto, a través de la retirada controlada del mismo.
“El mercado por sí solo ha demostrado que no es capaz de generar valor para el olivar tradicional”, indicó la UPA, anticipando que, al igual que ocurrió en la campaña anterior, este año se comercializará la totalidad de la producción. No obstante, la entidad ha destacado que esta regulación “puede en el futuro poner coto a las malas prácticas de los especuladores en el sector que todos sabemos que existen”.
La UPA ha anunciado que continuará trabajando en los próximos meses para perfeccionar esta normativa, centrando sus esfuerzos en limitar la retirada a aceites de menor calidad. “Con esta norma el Ministerio de Agricultura no puede lanzar el mensaje de que todas las categorías son iguales. El objetivo debería ser retirar del mercado las categorías que aportan menos valor, y primar a aquellos operadores que apuestan por la producción de calidad”, ha enfatizado la organización agraria.
Además, la UPA busca modificar algunos requisitos “para hacer la norma más funcional”, y propone la implementación de medidas detalladas en el preámbulo del Real Decreto 84/2021, que incluyen la regulación del rendimiento de extracción de aceite, la fijación de un rendimiento máximo de aceituna por hectárea y la planificación de la producción a través de la cosecha temprana.















