La organización agraria UPA Almería ha puesto en valor el efecto “beneficioso” de las lluvias caídas durante el fin de semana en las zonas del norte de la provincia y en el Levante almeriense. Las precipitaciones han contribuido a aliviar la situación de numerosos cultivos tras un largo periodo de sequía, aunque la entidad reconoce que se han registrado daños concretos en determinados invernaderos.
En declaraciones a Europa Press, la secretaria general de UPA Almería, Francisca Iglesias, ha detallado que la lluvia “no ha sido torrencial”, sino más bien “constante”, con registros que han oscilado entre “60 y 100 litros o más por metro cuadrado”.
Iglesias ha remarcado que este episodio ha resultado especialmente positivo para los cultivos extensivos y ha señalado que llega en un momento decisivo para producciones como los cereales, que “se habían sembrado en seco”, así como para el almendro y el olivar, que arrastraban meses sin aportes de agua relevantes.
La representante de UPA ha admitido que en el Levante almeriense, sobre todo durante la tarde-noche del domingo, se han producido afecciones en determinadas áreas de invernadero en enclaves como Pulpí, San Juan de los Terreros o Cuevas de Almanzora. No obstante, ha precisado que “los daños que se han producido no son tan importantes como lo bien que ha venido esta lluvia”.
En este sentido, ha recordado que en un primer momento temía que el campo fuese uno de los grandes damnificados por las inundaciones asociadas al paso de la borrasca “Emilia”, pero finalmente “podemos decir que el campo ha sido el más beneficiado en la provincia de Almería”. Según ha añadido, una situación similar se ha repetido en comarcas vecinas de la Región de Murcia.
Por otro lado, Iglesias ha señalado que aún hay incertidumbre sobre cómo evolucionará el tiempo en los próximos días, si bien ha valorado la mejoría registrada tras las lluvias y el balance globalmente positivo que deja este episodio para el sector agrario.