La conselleira do Mar, Marta Villaverde, ha expresado su preocupación al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación sobre las consecuencias que los recortes en los Totales Admisibles de Captura (TAC) y cuotas, propuestos por la Comisión Europea para 2026, podrían tener en la flota gallega.
Esta cuestión se ha planteado en el contexto del Consejo Consultivo de Política Pesquera y Política Agrícola, antes del Consejo de Ministros de Pesca de la UE, con el propósito de que España tome estos datos como referencia para las negociaciones que se llevarán a cabo la próxima semana en Bruselas.
Según Villaverde, los estudios realizados por la Universidad de Santiago de Compostela a solicitud de su consellería, muestran cifras “muy claras” sobre el “grave riesgo económico” que representarían estos recortes. Se estima que la disminución del 70% en la cuota de caballa, del 41% para la bacaladilla y del 26% en las cuotas de abadejo “supondrían un impacto económico que podría superar los 65 millones de euros”.
Esta situación repercutiría principalmente en las flotas de arrastre, cerco y palangre de Galicia, afectando especialmente a los puertos de A Coruña, Ribeira, Burela, Marín, Celeiro, Malpica, Camariñas, Laxe y Fisterra. Además, Villaverde ha señalado que las pérdidas también podrían extenderse a otros ámbitos como la comercialización y transformación, afectando a pequeños frigoríficos.
Por otro lado, la conselleira do Medio Rural, María José Gómez, ha solicitado al Gobierno Central la organización de una Conferencia Sectorial específica que incluya a los ministerios de Agricultura, Pesca y Alimentación y de Transición Ecológica y Reto Demográfico, para coordinar acciones contra la Peste Porcina Africana (PPA) a nivel nacional. Además, ha pedido un “esfuerzo” al ministro para alcanzar acuerdos de regionalización en las exportaciones y “minimizar el impacto en la comercialización exterior del producto”.
