Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía y miembro del PP-A, ha expresado este miércoles su desaprobación hacia la actitud del presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, quien el martes pasado se mostró sumiso ante Carles Puigdemont, líder de Junts y ex presidente de la Generalitat de Cataluña, con el único fin de “mantenerse unos meses más en el Gobierno”.
“Es vergonzoso”, declaró el presidente andaluz durante un intercambio con María Márquez, portavoz del Grupo Socialista, en la sesión de control al gobierno regional en el Parlamento andaluz.
Moreno criticó a Márquez, también vicesecretaria general del PSOE-A, por apoyar a Puigdemont, señalando que lo presenciado el martes fue “algo insólito”, con Sánchez “humillándose lamentablemente” frente al líder separatista catalán. Advirtió que el mayor problema de España es tener a “Pedro Sánchez sirviendo los intereses espurios del independentismo y el separatismo catalán”, y apuntó que a la derecha de Sánchez se sitúa María Jesús Montero, vicepresidenta primera y líder del PSOE andaluz.
El líder del PP-A también mencionó un acuerdo del Parlamento andaluz de 2018 que rechazaba el principio de la “ordinalidad” en el modelo de financiación autonómica, y criticó que ahora Sánchez y Montero quieren cambiar ese acuerdo, favoreciendo a las regiones más ricas en detrimento de las más pobres.
En otro momento, Moreno acusó a Márquez de adherirse a “políticas antiguas” y de utilizar “la mentira” como herramienta política, especialmente en temas de gestión sanitaria y supuestas privatizaciones. Recordó que la propia Ley de Salud Pública de 1998, aprobada por el PSOE, ya contemplaba la colaboración con el sector privado.
Finalmente, Moreno lamentó que la portavoz socialista intentase una “segunda vuelta” del debate sobre el estado de la Comunidad de la semana anterior, evidenciando que “no le fue muy bien” y buscando mejorar su imagen, mientras criticaba que el actual gobierno de PSOE y Sumar no logra avanzar en las Cortes por falta de apoyos ni presentar un proyecto de presupuestos, a pesar de que la Constitución lo exige.