Este miércoles, el Pleno del Parlamento de Andalucía ha votado en contra de la proposición no de ley (PNL) presentada por los partidos de izquierda —PSOE-A, Por Andalucía y Grupo Mixto-Adelante Andalucía— que buscaba apoyar la sanidad pública. La iniciativa, que contó con el rechazo de PP-A y Vox, pretendía que el Parlamento respaldase a las entidades sociales y sindicatos comprometidos con la defensa de la sanidad pública en la región.
La proposición también solicitaba un pronunciamiento del Parlamento contra la gestión del Gobierno de la Junta en la crisis del programa de cribado de cáncer de mama, denunciando una gestión “opaca, desinformadora e institucionalmente hostil”, además de criticar las “declaraciones descalificadoras hacia las mujeres afectadas y hacia la asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama)”. Se acusaba al Gobierno de utilizar herramientas administrativas para presionar a las denunciantes y obstruir la clarificación pública de los eventos.
Además, la PNL de izquierdas exigía más transparencia al Gobierno andaluz, pidiendo la publicación de los datos de listas de espera para pruebas diagnósticas, de manera completa y accesible, antes del final de 2025. Querían que se estableciese un sistema de información pública regular y sin restricciones que refleje la actividad real de los programas de cribado oncológico.
PP-A cuestiona a la izquierda por utilizar la sanidad como herramienta política
Desde el PP-A, la diputada Beatriz Jurado cuestionó la honestidad de los grupos de izquierda, acusándolos de manipular la sanidad para beneficio político. Por su parte, la representante de Vox, Ana María Ruiz, criticó el manejo histórico de la sanidad por parte de los gobiernos bipartidistas de PSOE y PP, describiéndolo como un fracaso doble.
Otra PNL, discutida antes y también rechazada por el PP-A, propuesta por Por Andalucía, exigía la publicación de las listas de espera y tiempos de demora para pruebas diagnósticas. El diputado del PP-A, Manuel Bonilla, propuso una enmienda para homogeneizar los criterios a nivel nacional antes de publicar estos datos, lo cual fue rechazado por Por Andalucía.
En resumen, el debate en el Parlamento andaluz destacó profundas divisiones sobre cómo gestionar y mejorar la sanidad pública, con acusaciones cruzadas sobre la transparencia y eficacia de las políticas sanitarias actuales.