En una reciente reunión en el Parlamento de Andalucía, Catalina García, consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, junto con José María Mancheño, presidente de la Federación Andaluza de Caza (FAC), discutieron el avance del ‘Pacto Andaluz por la Caza’. La Consejería ha declarado que pronto se publicará en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) el documento final del plan de gestión adaptativa de la tórtola europea (Streptopelia turtur) para la temporada 2025-2026.
La consejera ha resaltado que «Andalucía ha sido ejemplo a nivel europeo en la apuesta e implementación del uso de esta herramienta de gestión cinegética basada en criterios técnicos, seguimiento poblacional y control riguroso de las capturas». Además, se ha introducido el Precinto Digital de Caza para mejorar la trazabilidad y transparencia de las capturas. Este sistema electrónico facilitará el registro de las piezas cazadas en tiempo real.
La lista definitiva de los cotos autorizados y sus cupos asignados se hará pública en breve, asegurando que todos los implicados estén bien informados sobre las condiciones del plan. Durante la reunión, también participaron Sergio Arjona, viceconsejero; Juan Ramón Pérez Valenzuela, director general de Política Forestal y Biodiversidad; y Juan Ortegón, director del Instituto Andaluz de Caza y Pesca Continental.
Un punto significativo tratado fue la creación de la primera orden de control de predadores, considerada una «medida clave para la protección de la caza menor» y una respuesta a una «reivindicación histórica del sector cinegético andaluz». García ha comentado que «estamos trabajando en una orden que llevaba más de 25 años de retraso» y que esta nueva regulación permitirá el control de especies predadoras «de forma ordenada y conforme a criterios técnicos y ambientales».
Finalmente, se mencionó el inicio de la tramitación de la Orden que regulará la figura del guarda jurado de caza, una iniciativa que «permitirá dotar de mayor seguridad jurídica, formación especializada y claridad normativa a un colectivo esencial en la gestión sostenible del medio natural», culminando con la afirmación de que «Nuestro propósito es establecer un marco robusto, riguroso y útil para quienes llevan décadas siendo los guardianes del monte y aliados imprescindibles de la biodiversidad».