La Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA), bajo la dirección de la Consejería de Fomento, Vivienda y Articulación del Territorio, está procediendo a la actualización y ajuste del plan destinado a la rehabilitación del Corralón de las Dos Puertas, un edificio histórico situado en el centro de Málaga, reconocido en el Catálogo Histórico Andaluz y en el Catálogo de Edificaciones Protegidas del PGOU de Málaga.
La consejera de Cultura de la Junta, Patricia del Pozo, ha anunciado que espera que la documentación sea aprobada pronto por su consejería para “poder poner en valor” este inmueble. Del Pozo respondió así a las críticas del diputado regional de Vox, Antonio Sevilla, quien en una sesión parlamentaria acusó a la Junta de mostrar una “falta de interés o de voluntad política” en su gestión.
Sevilla destacó que el inmueble está incluido en la Lista Roja de Hispania Nostra y señaló problemas como “caídas en la medianera, entradas de agua y amenaza de desplome”. Además, criticó duramente al gobierno regional por su negligencia, subrayando que el edificio es propiedad de la Junta de Andalucía. “El Corralón de las Dos Puertas es el último corralón intacto que queda en la ciudad: casa de vecinos con patio central y galerías abiertas, testimonio vivo de la Málaga obrera que marcó barrios como El Perchel o La Trinidad. No puede seguir tapiado y degradándose”, afirmó Sevilla.
Patricia del Pozo también mencionó que la edificación refleja la tendencia de las “casas de vecindad” típicas de muchos barrios de la capital malagueña desde finales del siglo XIX y principios del XX, destinadas a las familias que migraban del campo a la ciudad en búsqueda de trabajo. Confirmó que el corralón data de alrededor del año 1900, y que está considerado bien de catalogación general dentro del Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, además de estar protegido arquitectónicamente por el PGOU de Málaga con el grado más alto.
Desde 2019, la AVRA ha iniciado labores para valorizar el corralón, que había sido abandonado durante años, y en diciembre de 2020, presentaron el proyecto básico y de ejecución para su reforma y rehabilitación, junto con un estudio de patologías. Posteriormente, en 2021, se llevó a cabo una inspección técnica que confirmó que el edificio conserva su estructura original, fachada exterior y cubierta. Tras una reunión en verano de 2023, se está trabajando en la incorporación de los requerimientos de la consejería de Cultura, ajustándolos a las normativas vigentes sobre vivienda protegida.
“AVRA nos ha trasladado que el proyecto se encuentra en fase de actualización por parte de la agencia. Se está trabajando para la incorporación de los requerimientos de Cultura conjugándolo con las necesidades normativas en materia de vivienda protegida”, concluyó Del Pozo, expresando su deseo de que pronto se autorice el inicio de las obras de rehabilitación.