Este lunes, la Comisión de Hacienda de las Cortes de Aragón ha analizado una proposición no de ley de Vox que busca «el refuerzo de la fiscalidad diferenciada del Título VIII de la Ley de Dinamización del Medio Rural de Aragón para mejorar la natalidad, favorecer la compra y rehabilitación de vivienda y dinamizar el emprendimiento en todos los sectores».
La propuesta ha sido objeto de una enmienda ‘in voce’ por parte del PSOE, que ha sido aceptada. Sin embargo, a pesar del apoyo de PSOE, Vox y A-TE, la iniciativa no ha prosperado debido a los votos en contra del PP, CHA e IU.
Fermín Civiac, diputado de Vox, ha defendido la iniciativa destacando que «Aragón es una de las regiones europeas con menor densidad de población», con cifras especialmente bajas en Huesca y Teruel. Civiac ha enfatizado la necesidad de complementar los programas activados por la Comunidad con incentivos fiscales que faciliten la vida en el medio rural.
Por otro lado, Blanca Puyuelo del PP ha recordado las palabras de Jorge Azcón sobre una «rebaja fiscal de 534 millones que no pusiera en peligro nuestras cuentas» y ha argumentado que aprobar esta proposición no ayudaría en las negociaciones de rebajas fiscales. Óscar Galeano del PSOE ha expresado su apoyo con reservas, señalando la importancia del principio de progresividad fiscal.
José Luis Soro de CHA ha advertido sobre los riesgos de no implementar la medida adecuadamente y ha subrayado la importancia de los servicios públicos para el arraigo en el territorio. Tomás Guitarte de A-TE ha apoyado la necesidad de una fiscalidad diferenciada, aunque ha discrepado en algunos puntos de la propuesta, preferiendo enfocarse en mejorar los servicios públicos. Finalmente, Álvaro Sanz de IU ha criticado la iniciativa como un intento de convertir el medio rural en un «paraíso fiscal», y ha defendido la necesidad de impuestos para impulsar políticas públicas en estas áreas.