Izquierda Unida ha presentado 58 enmiendas a la Proposición de Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales de Aragón, buscando fortalecer su aplicación y asegurarse de que sirva como un instrumento efectivo y provisto de presupuesto, que promueva cambios significativos en la vida de las mujeres en zonas rurales. Se destaca que el 70% de quienes dejan estos entornos son mujeres, y para IU, “es imprescindible incorporar la igualdad en las medidas contra la despoblación”.
Entre las enmiendas, IU propone cambios que tratan temas como la diversidad de las mujeres del campo, la conciliación de responsabilidades, protección contra la violencia de género, acceso a servicios básicos y el reconocimiento del labor femenino en todos los ámbitos laborales. Además, sugieren cambiar la terminología de “violencia de género” por “violencia machista”, para ampliar la protección contra todas las formas de violencia hacia las mujeres.
En cuanto a los cuidados, IU introduce la idea de la conciliación corresponsable en el sector agrícola, con la creación de servicios de sustitución ya implementados en otras regiones. Estos servicios permitirían a las mujeres seguir trabajando en el campo mientras hacen uso de permisos de conciliación, vacaciones y descansos, “fundamentales para garantizar los derechos derivados de la maternidad y la paternidad, así como el derecho al descanso”.
La propuesta también aboga por la transversalidad y la necesidad de “incorporar el enfoque de interseccionalidad en todas las políticas públicas”, reconociendo la heterogeneidad del grupo de mujeres rurales. Propone además la creación de grupos de trabajo permanentes en diferentes consejos y observatorios para asegurar la implementación de políticas con perspectiva de género.
Izquierda Unida también recomienda la implementación de servicios itinerantes, la mejora del transporte público con una perspectiva de género, y promueve la cultura y el arte en las zonas rurales con ayudas específicas para mujeres artistas. En vivienda y acceso a la administración, plantea simplificar procesos y mejorar la formación del personal administrativo. También sugiere la firma de convenios para facilitar trámites administrativos y reducir desplazamientos.
Álvaro Sanz, portavoz de IU en las Cortes de Aragón, ha subrayado: “Queremos que esta ley sea realmente útil para mejorar la vida de las mujeres rurales, que reconozca su diversidad, sus aportes y sus derechos. No basta con buenas intenciones, hacen falta medidas concretas, recursos públicos y voluntad política”. Sanz también ha destacado la diversidad y las diferentes necesidades de las mujeres rurales, enfatizando la importancia de una ley que les ofrezca respeto y garantías.
Finalmente, IU propone que la Mesa de Mujeres Rurales sea el órgano consultivo principal, y enfatiza en la necesidad de dotar adecuadamente a la Unidad de Igualdad del departamento competente, así como de asegurar la evaluación y seguimiento continuos de la ley. “Esta ley debe ser una herramienta viva, con seguimiento, evaluación y participación. No podemos permitir que se apruebe y se guarde en un cajón”, concluyó Sanz.