Manuel Domínguez, vicepresidente y consejero de Economía del Gobierno de Canarias, ha enfatizado en el Parlamento el rechazo del Ejecutivo a la exploración de tierras raras en Fuerteventura. Domínguez argumentó que, aunque se busca una ‘diversificación económica’, no debe implicar un mayor uso del suelo en el archipiélago.
En un debate parlamentario, tras una cuestión planteada por el diputado Nicasio Galván de Vox, sobre si se había evaluado el impacto económico de esta industria en las islas, Domínguez fue claro al afirmar que el Gobierno no ha hecho ni hará tal estudio, apostando por sectores que requieran ‘menor consumo de terreno’ como el ‘gaming’, cine, industrias aeroespacial y aeronaval, y energías renovables.
Galván subrayó la ‘emergencia demográfica’ en Canarias, destacando la baja tasa de natalidad, ‘0,8 niños por mujer’, y la necesidad de ‘luchar por la brecha maternal’. Se mostró interesado en saber si las tierras raras podrían contribuir a mejorar la productividad y diversificación económica en las islas.
Domínguez también mencionó la ‘pérdida de oportunidad’ en el uso de combustibles como el gas natural, que hubiera facilitado una transición energética. Reiteró la complejidad de considerar la explotación de tierras raras debido a los ‘conflictos de intereses’ y los efectos negativos en el terreno, aunque destacó el compromiso del Gobierno con la diversificación económica que aporte ‘alto valor añadido’ al archipiélago.









