El Parlamento de Cantabria ha decidido este lunes no apoyar la propuesta de considerar el Palacio de La Magdalena en Santander como Lugar de Memoria Democrática, contando con el apoyo de PP y Vox y la oposición de PRC y PSOE. Asimismo, se ha planteado la posibilidad de anular la ley autonómica de Memoria Histórica, decisión que fue pausada por el Tribunal Constitucional tras admitir el recurso de inconstitucionalidad interpuesto por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en 2024.
La proposición no de ley, impulsada por el PP, surge como respuesta a la decisión de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática de iniciar el procedimiento para declarar a La Magdalena como el primer Lugar de Memoria en Cantabria, debido a que albergó un campo franquista de concentración. Desde el PP, se acusa al Gobierno de querer “rescribir” y “manipular” la historia, y desviar la atención de problemas más urgentes y los escándalos de corrupción vinculados a Pedro Sánchez.
Desde el PP, se argumenta que el reconocimiento del lugar como Lugar de Memoria haría una “injusticia con la Historia” y con las familias afectadas por la violencia política de épocas pasadas. Íñigo Fernández, diputado popular, ha expresado que, aunque La Magdalena fue un sitio de encarcelamiento, no debería ser ello lo que defina al Palacio. En su lugar, lo describe como “el lugar más hermoso de la ciudad”, destacando su historia como regalo de los santanderinos a la familia real y su función actual en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
Por otro lado, el PSOE y el PRC defienden la necesidad de mantener la memoria histórica como un medio para la verdad y la reconciliación, no como una forma de división. Ambos partidos critican la postura del PP y Vox como un intento de minimizar los crímenes del Franquismo y de reescribir la historia a su conveniencia.











