QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
El pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha ha ratificado la Ley de Simplificación, Agilización y Digitalización Administrativa, con el apoyo de PSOE y Partido Popular, mientras que Vox ha votado en contra.
El vicepresidente primero, José Luis Martínez Guijarro, ha explicado que el propósito de esta legislación es ‘avanzar hacia una Administración regional más moderna, dinámica, digitalizada y proactiva, además de más cercana a los ciudadanos’. La ley, que fue debatida con 16 enmiendas de Vox y tres votos particulares -todos desestimados por PP y PSOE-, está estructurada en seis títulos y 71 artículos e introduce importantes modificaciones como la creación de unidades de apoyo administrativo para momentos críticos y la digitalización de procesos.
Según Martínez Guijarro, esta ley facilitará la colaboración entre entidades y la administración, y transformará el servicio público con herramientas como la Inteligencia Artificial. El vicepresidente ha enfatizado la necesidad de un modelo administrativo que ‘confíe más en el administrado pero que al mismo tiempo establezca garantías’.
Ángel Tomás Godoy, del PSOE, ha lamentado la falta de consenso con Vox y ha valorado positivamente la contribución del PP. Ha resaltado que la ley busca ‘una Administración más ágil y eficaz’ y garantiza la transparencia y la confianza en la administración y sus trabajadores.
Por su parte, Luis Juan Blázquez de Vox, ha criticado la ley calificándola de ‘operación de maquillaje legislativo’ y ha denunciado lo que considera una ‘privatización encubierta de los servicios públicos’. Blázquez ha señalado que su partido había propuesto un plan de simplificación más efectivo y transparente.
Finalmente, Santiago Serrano del PP ha indicado que su apoyo a la ley ‘no será un cheque en blanco’ y destacó las modificaciones logradas para incluir a los ayuntamientos y al sector agrícola en la normativa, asegurando que su partido ha tenido un papel crucial en la mejora de la ley durante el proceso parlamentario.
