Francisco Igea, procurador por Valladolid en el Grupo Mixto, ha lanzado duras críticas este martes a la Junta de Castilla y León, a la que ha calificado como “el Gobierno más pro-abortista de la historia de Castilla y León” debido a su gestión en materia de natalidad. Ha argumentado que la región ha experimentado un aumento en el número de abortos, pasando de 2.597 a 3.175 interrupciones voluntarias del embarazo en 2024, lo que sitúa a Castilla y León a la cabeza de los incrementos nacionales en esta estadística.
Igea ha remarcado que las técnicas empleadas para realizar estos abortos son “con el sistema más traumático posible”, con un 75 por ciento de los casos mediante dilataciones y aspiraciones. Comparó estos datos con otros territorios como Navarra, donde el 80 por ciento de los abortos son medicamentosos, y Cataluña, con casi el 60 por ciento.
“Sometemos a las mujeres al trauma, no les damos información y conseguimos que en esta Comunidad se lidere también el número de interrupciones voluntarias en menores de 15 años, 20 el año pasado. Este es su resultado”, criticó Igea a la administración regional.
En contraposición, Isabel Blanco, vicepresidenta del Gobierno autonómico y consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, ha defendido las medidas de su gobierno. Resaltó el incremento del 5 por ciento en los nacimientos respecto al año anterior y mencionó la recepción de ayudas como el ‘bono nacimiento’ y el ‘bono Concilia’ de 750 euros. “Algo estaremos haciendo bien”, ha concluido Blanco.