Castilla y León

Igea se despide en las Cortes pidiendo que Castilla y León salga de la resignación y recupere la confianza en sí misma

Francisco Igea se despide de las Cortes pidiendo que Castilla y León abandone la resignación, mientras Mañueco defiende un balance positivo de la legislatura.

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El procurador del Grupo Mixto, Francisco Igea, ha utilizado este martes su última pregunta oral de la legislatura al presidente Alfonso Fernández Mañueco, durante el Pleno de las Cortes de Castilla y León, para expresar su anhelo de que la Comunidad "salga de la resignación" en la que, según ha denunciado, "algunos la han dejado" y "vuelva a creer en sí misma".

En la parte final de su intervención, dirigida al jefe del Ejecutivo autonómico, Igea ha remarcado: "No le deseo nada malo en lo personal, señor Mañueco, pero sí deseo que esta tierra salga de la resignación", cerrando así su turno de palabra ante el hemiciclo.

A modo de balance, el representante del Grupo Mixto ha hilado un discurso en el que ha recorrido sus diez años de vida política, una etapa que, como ha apuntado, se cumple precisamente esta semana. Recurriendo a la célebre cita de Blade Runner, ha señalado que durante este tiempo: "He visto cosas que ustedes no creerían", para después relatar distintos episodios políticos y experiencias personales vividos tanto dentro como fuera de Castilla y León.

En su repaso, el procurador ha evocado momentos clave de la política nacional y, en el plano autonómico, ha lamentado que en estos años "se abriera la puerta al terror" con la entrada de Vox, además de rememorar "el sufrimiento de muchas personas durante la pandemia". Visiblemente emocionado, ha confesado: "He visto morir a mucha gente, he visto gente llorar porque no alcanzábamos a protegerlos".

Con un tono claramente de despedida, Igea ha instado a los procuradores que continuarán en la Cámara a que se cuestionen "para qué" sirve su labor política y que, si no encuentran una respuesta clara, "no les sonroje dejarlo". "Yo creía en lo que hacía -ha afirmado-, siempre he creído en lo que hacía", ha indicado, antes de reiterar su llamamiento a que Castilla y León "abandone la resignación y vuelva a creer en sí misma".

Tras la intervención de Igea, Fernández Mañueco ha tomado la palabra para defender que el Gobierno autonómico y el PP pueden realizar "un balance positivo" de la legislatura, que, según ha remarcado, se ha caracterizado por el "cumplimiento de los compromisos asumidos" y "los avances en derechos, servicios públicos y oportunidades para las personas".

El presidente de la Junta ha recordado que comenzó el mandato "con un programa ambicioso y completo" en la sesión de investidura y ha sostenido que, al cierre del periodo legislativo, "se puede presentar un alto grado de cumplimiento de aquel programa". "Me siento orgulloso de que Castilla y León funcione y destaque por encima de la media de España", ha enfatizado.

El dirigente autonómico ha destacado como "especialmente relevantes" las iniciativas dirigidas al "crecimiento económico, la creación de empleo, la modernización de esta tierra y la transformación del campo", así como "el refuerzo de los servicios públicos esenciales", entre los que ha citado la vivienda y el transporte. A su juicio, "son políticas que dignifican la labor de quienes estamos en la responsabilidad de la política".

Del mismo modo, Mañueco ha puesto en valor el "impulso sin precedentes" de Castilla y León en el ámbito de los servicios públicos. "Somos los mejores en educación, sanidad, servicios sociales, atención a los mayores y a los dependientes", ha asegurado ante el Pleno.

"Creo que es importante sentirnos orgullosos de esas políticas útiles y eficaces que hemos ido desarrollando a lo largo de esta legislatura para las familias, para los jóvenes, para los mayores que lo merecen todo", ha concluido el presidente autonómico.