Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta de Castilla y León, ha reafirmado su compromiso de continuar su labor al frente del Gobierno regional después de las elecciones de 2026, prometiendo que “hará lo posible” para preservar su gestión “eficaz”. Durante un debate en el Pleno de las Cortes, ha evitado comprometerse a que la lista más votada sea la que gobierne, respondiendo a las demandas del procurador de Unidas Podemos, Pablo Fernández.
“En las próximas elecciones autonómicas de Castilla y León gobernará quien decida el pueblo de Castilla y León”. “Lo que sí le puedo decir es que yo me comprometo a que voy a hacer todo lo posible por seguir manteniendo esa gestión eficaz para merecer la confianza de mi pueblo”, explicó Fernández Mañueco.
Por otro lado, Pablo Fernández criticó duramente la gestión del PP, especialmente por su manejo de los incendios y su reciente acercamiento a posturas más extremas, lo que calificó de “giro a la ultraderecha”. Según él, esta aproximación a políticas radicales no beneficiará al PP en las urnas. “Al final la gente vota la original y no la réplica y es muy complicado disputar el racismo a Vox”, apuntó, además de condenar la falta de crítica del PP hacia situaciones internacionales controvertidas.
Además, ironizó sobre la futura ausencia de Pablo Fernández en las próximas elecciones, destacando su estilo único en la política. Fernández Mañueco criticó la política del “ruido” de Unidas Podemos y defendió la gestión del PP como seria y efectiva, destacando logros en vivienda, transporte y apoyo a familias y trabajadores.
“Usted, como está mucho en Madrid, no se da cuenta de cuál es la realidad de Castilla y León”, reprochó el presidente a Fernández, enfatizando el liderazgo de la región en educación y salud, entre otros. “Les retuerce por dentro, pero esa es la realidad, porque nosotros lo que tenemos es, desde luego, es una política que da frutos y una política que ofrece resultados”, concluyó.